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¿HUBO ALGUNA un barrio judío en el almendral, recia moza? Yo creo que no, porque como este asentamiento se construyo a raíz de la destrucción de otro anterior y, si tenemos en cuenta que cuando la castellana Isabel y el catalano-aragonés Ferran, junto con Torquemada, decidieron que se tenían que ir por cataplines todos ellos de Sefarad, se estaba acabando el siglo XV, y los más seguro es que no quedara ninguno ya por estos pagos. Por lo menos que profesara su religión, origen de la cristiana y de la mahometana. Conversos puede que sí, pero ya de generaciones posteriores y, puede que provenientes de otras regiones, máxime siendo como es este un terreno llano donde las posibilidades de pasar desapercibidos eran pocas y más, dependiendo como dependía la población por entonces del Concejo de Badajoz.
SIN EMBARGO, en Alburquerque, Alconchel, Barcarrota, Burguillos, Fregenal, Fuente de Cantos, Fuente del Maestre, Fuentes de León, Jerez de los Caballeros, Llerena, Medellín, Mérida, Montijo, Segura, Villanueva y Zafra, si que había, y algún descendiente suyo quedará, digo yo. Sobre todo en Alconchel, donde aún hoy persiste un importante legado en la falda de la montaña y al abrigo del castillo de Miraflores.
PERO HOY, te quería hablar de este pueblo elegido al que, primero Tito y más tarde Adriano, expulsaron de La Tierra Prometida, aquella en la que manaba miel y leche, y que se vieron obligados a vagar por todos los países ribereños del Mediterráneo, Centro Europa e incluso en la fría Rusia. Países todos en los que casi siempre estuvieron al cobijo de una cerca.
LA VERDAD ES QUE, cuando aquellos del tanto monta monta tanto, los echaron de la península junto con los moros, el nivel cultural y empresarial pegó un bajonazo que se ha venido arrastrando desde entonces; que además se agravó con aquellas guerras tontas en las que nos metieron sus sucesores con el resto de los europeos y que unos años después acabó en Rocroy como tenía que terminar, igual que el rosario de la aurora. La verdad es que los españolitos lo pagaron caro, en sangre y en especies, pues bien que se despilfarraron los bienes que se extraían en las Americas.
PERO LAS DESGRACIAS del pueblo elegido no acabaron, sino todo lo contrario, en algunos sitios fue mucho peor, hasta el extremo que, otro pueblo, cuyos integrantes decían que eran de una raza superior, redujo a cenizas a casi seis millones.
MÁS TARDE, en 1.948, a los que quedaron vivos les ofrecieron la posibilidad de asentarse en la Tierra Prometida, y ahí están ahora casi la mitad, forcejeando continuamente con los propietarios del lugar por ellos ocupados para asentar el Estado de Israel, quienes nunca admitieron ese acto de fuerza impuesto por potencias armadas ajenas al territorio.
Pero está más que claro, que el diálogo con los que elevan a la categoría de libro revelado por una divinidad sus tradiciones, es muy difícil, y más si se quiere imponer una visión unilateral pues, Yavhé solo atribuyó la tierra prometida a los judíos.
Y VOLVEMOS a la cerca, esta vez en forma de un imponente muro de cemento armado, alambradas y hombres y mujeres armados hasta los dientes. El ejército mejor dotado de herramientas de matar que hay en Oriente Próximo, eso si no es uno de los más artillados del mundo. Pues ahí están, entrando en ciudades prácticamente abiertas y soltándole tiros y bombazos a todo lo que se menea y a lo que está quieto también. La excusa es que sienten amenazada su integridad física y territorial, ¿Y cuándo no han estado amenazados? ¿Y cuándo no han estado perseguidos? Pero, si a ellos le han hecho tantas perrerías a lo largo de toda de su historia conocida, ¿es necesario que ahora se las hagan ellos a los palestinos, es necesario que estos se enfrente diariamente a una humillación diseñada estratégica y deliberadamente por los diferentes gobiernos que ha tenido Israel desde su refundación en el siglo pasado?
LAS PERSONAS que ven esas escenas sangrantes sólo aceptables por una sociedad anestesiada, quizá no sepan que tanta violencia tiene sus raíces en una política interesada en hacer imposible la convivencia. Una política que adiestra a sus guerreros para que intimiden física y psicológicamente a los que intentan sobrevivir, machacándole sin piedad su dignidad e impidiéndoles incluso que se relacionen con sus familiares y vecinos, a no ser, que estén dispuestos a sufrir la prepotente e inmisericorde actuación de unos soldados arrogantes que se sienten intocables y protegidos por unos poderes terrenales que les protegen desde más allá de sus fronteras.
YANQUILANDIA, donde viven seis o siete millones de hijos de Israel, veta siempre y por sistema, cualquier intento de reacción de la ONU. Actualmente serán unos dieciocho o veinte millones en todo el mundo y, aparte de hombres y mujeres de ciencia, que hay muchos y muy buenos, muchos otros controlan el negocio de las piedras preciosas, bursátiles, petrolero e industrias de todas las clases. Y cómo no, también muchos periódicos y televisiones, encargados de vender la bola de su INDEFENSIÓN y de los ataques que sufren a diario, o de que ponen a los niños como escudos humanos y otras tonterías parecidas.
PERO el trabajo de los medios de comunicación continuamente obstaculizado, a veces nos hace llegar unas imágenes que por sí mismas debieran hacernos meditar sobre la barbarie y la cobardía, pero no hay tu tía; por eso hacen lo que hacen, a sabiendas de su infinita superioridad y capacidad para matar con total impunidad, sin correr riesgo alguno, dotados de una maquinaria expresamente fabricada para matar a la que enfrentan a ciudadanos indefensos sobre los que descargan la ira del Dios de los Judíos. Aquel, que cuando dio a Moisés las Tablas de la Ley, le hizo escribir, NO MATARÁS, no desearás los bienes ajenos, y así hasta diez. Pero esas y otras, se las pasan por el arco de su triunfo.
Salud.
SIN EMBARGO, en Alburquerque, Alconchel, Barcarrota, Burguillos, Fregenal, Fuente de Cantos, Fuente del Maestre, Fuentes de León, Jerez de los Caballeros, Llerena, Medellín, Mérida, Montijo, Segura, Villanueva y Zafra, si que había, y algún descendiente suyo quedará, digo yo. Sobre todo en Alconchel, donde aún hoy persiste un importante legado en la falda de la montaña y al abrigo del castillo de Miraflores.
PERO HOY, te quería hablar de este pueblo elegido al que, primero Tito y más tarde Adriano, expulsaron de La Tierra Prometida, aquella en la que manaba miel y leche, y que se vieron obligados a vagar por todos los países ribereños del Mediterráneo, Centro Europa e incluso en la fría Rusia. Países todos en los que casi siempre estuvieron al cobijo de una cerca.
LA VERDAD ES QUE, cuando aquellos del tanto monta monta tanto, los echaron de la península junto con los moros, el nivel cultural y empresarial pegó un bajonazo que se ha venido arrastrando desde entonces; que además se agravó con aquellas guerras tontas en las que nos metieron sus sucesores con el resto de los europeos y que unos años después acabó en Rocroy como tenía que terminar, igual que el rosario de la aurora. La verdad es que los españolitos lo pagaron caro, en sangre y en especies, pues bien que se despilfarraron los bienes que se extraían en las Americas.
PERO LAS DESGRACIAS del pueblo elegido no acabaron, sino todo lo contrario, en algunos sitios fue mucho peor, hasta el extremo que, otro pueblo, cuyos integrantes decían que eran de una raza superior, redujo a cenizas a casi seis millones.
MÁS TARDE, en 1.948, a los que quedaron vivos les ofrecieron la posibilidad de asentarse en la Tierra Prometida, y ahí están ahora casi la mitad, forcejeando continuamente con los propietarios del lugar por ellos ocupados para asentar el Estado de Israel, quienes nunca admitieron ese acto de fuerza impuesto por potencias armadas ajenas al territorio.
Pero está más que claro, que el diálogo con los que elevan a la categoría de libro revelado por una divinidad sus tradiciones, es muy difícil, y más si se quiere imponer una visión unilateral pues, Yavhé solo atribuyó la tierra prometida a los judíos.
Y VOLVEMOS a la cerca, esta vez en forma de un imponente muro de cemento armado, alambradas y hombres y mujeres armados hasta los dientes. El ejército mejor dotado de herramientas de matar que hay en Oriente Próximo, eso si no es uno de los más artillados del mundo. Pues ahí están, entrando en ciudades prácticamente abiertas y soltándole tiros y bombazos a todo lo que se menea y a lo que está quieto también. La excusa es que sienten amenazada su integridad física y territorial, ¿Y cuándo no han estado amenazados? ¿Y cuándo no han estado perseguidos? Pero, si a ellos le han hecho tantas perrerías a lo largo de toda de su historia conocida, ¿es necesario que ahora se las hagan ellos a los palestinos, es necesario que estos se enfrente diariamente a una humillación diseñada estratégica y deliberadamente por los diferentes gobiernos que ha tenido Israel desde su refundación en el siglo pasado?
LAS PERSONAS que ven esas escenas sangrantes sólo aceptables por una sociedad anestesiada, quizá no sepan que tanta violencia tiene sus raíces en una política interesada en hacer imposible la convivencia. Una política que adiestra a sus guerreros para que intimiden física y psicológicamente a los que intentan sobrevivir, machacándole sin piedad su dignidad e impidiéndoles incluso que se relacionen con sus familiares y vecinos, a no ser, que estén dispuestos a sufrir la prepotente e inmisericorde actuación de unos soldados arrogantes que se sienten intocables y protegidos por unos poderes terrenales que les protegen desde más allá de sus fronteras.
YANQUILANDIA, donde viven seis o siete millones de hijos de Israel, veta siempre y por sistema, cualquier intento de reacción de la ONU. Actualmente serán unos dieciocho o veinte millones en todo el mundo y, aparte de hombres y mujeres de ciencia, que hay muchos y muy buenos, muchos otros controlan el negocio de las piedras preciosas, bursátiles, petrolero e industrias de todas las clases. Y cómo no, también muchos periódicos y televisiones, encargados de vender la bola de su INDEFENSIÓN y de los ataques que sufren a diario, o de que ponen a los niños como escudos humanos y otras tonterías parecidas.
PERO el trabajo de los medios de comunicación continuamente obstaculizado, a veces nos hace llegar unas imágenes que por sí mismas debieran hacernos meditar sobre la barbarie y la cobardía, pero no hay tu tía; por eso hacen lo que hacen, a sabiendas de su infinita superioridad y capacidad para matar con total impunidad, sin correr riesgo alguno, dotados de una maquinaria expresamente fabricada para matar a la que enfrentan a ciudadanos indefensos sobre los que descargan la ira del Dios de los Judíos. Aquel, que cuando dio a Moisés las Tablas de la Ley, le hizo escribir, NO MATARÁS, no desearás los bienes ajenos, y así hasta diez. Pero esas y otras, se las pasan por el arco de su triunfo.
Salud.