¡Qué listo es mi niño, coño!
Gazmoño:
Que finge mucha devoción o escrúpulos. También: mojigato.
Mojigato:
Que finge timidez y humildad.
Y es que los disco rayados, cuando la aguja se encaja en un surco, ya se sabe......
¿Quién le habrá pedido amor a esta hidra de varias molleras y apéndices ganchudos?
Que es que no se quiere enterar..., y mira que se lo hemos dicho tú y yo veces moza. Mira que le hemos dicho veces, que a nuestros amigos los elegimos nosotros. Que no la hemos necesitado nunca y cuando se ha presentado voluntaria diciendo que es para hacer un ayudar y sin que nadie los llamara, ha sido para asfixiarnos o exprimirnos..
¿Entiende? No sé.
¿Comprende? Sólo lo que quiere.
¿Como le dices que hay gente normal, sencilla, buena, sin dobleces, sin mala leche? ¿Cómo le explicas que esta gente sencilla y normal, quieren a quienes ellos creen que se merecen amor, tienen afecto a quienes ellos creen que lo merecen, que lo que dan, lo dan sin condiciones (sin con-di-cio-nes), que ayudan a quienes merecen ayudad. Que no esperan ni quieren recibir nada a cambio. Que les importa una breva rayona, si el ayudado, después le paga con odio, traición o con desprecios o menosprecios y es incapaz en su soberbia, de sentir y expresar, el entrañable sentimiento llamado agradecimiento. Vamos..., decir, por lo menos, gracias.
¿Cómo le explicas a la hidra metomentodo con cualquiera de sus múltiples cabezas? Que hay gente que hacen el bien sin mirar a quién. Y ya está, punto, porque son buenas y nada más.
No es mi caso, ni el tuyo, claro está, yo, moza, y tú también, hace muchos años que le vimos las patas y las cabezas a este ser sanguinario que envilece lo que toca y que, lo único que tiene bueno, son palabritas. Nada más.
Que la Virgen de Finibus o la que nació en Magdala, nos protejan siempre de el como han hecho hasta ahora.
¡Gracias, mujeres!
Salud.
Gazmoño:
Que finge mucha devoción o escrúpulos. También: mojigato.
Mojigato:
Que finge timidez y humildad.
Y es que los disco rayados, cuando la aguja se encaja en un surco, ya se sabe......
¿Quién le habrá pedido amor a esta hidra de varias molleras y apéndices ganchudos?
Que es que no se quiere enterar..., y mira que se lo hemos dicho tú y yo veces moza. Mira que le hemos dicho veces, que a nuestros amigos los elegimos nosotros. Que no la hemos necesitado nunca y cuando se ha presentado voluntaria diciendo que es para hacer un ayudar y sin que nadie los llamara, ha sido para asfixiarnos o exprimirnos..
¿Entiende? No sé.
¿Comprende? Sólo lo que quiere.
¿Como le dices que hay gente normal, sencilla, buena, sin dobleces, sin mala leche? ¿Cómo le explicas que esta gente sencilla y normal, quieren a quienes ellos creen que se merecen amor, tienen afecto a quienes ellos creen que lo merecen, que lo que dan, lo dan sin condiciones (sin con-di-cio-nes), que ayudan a quienes merecen ayudad. Que no esperan ni quieren recibir nada a cambio. Que les importa una breva rayona, si el ayudado, después le paga con odio, traición o con desprecios o menosprecios y es incapaz en su soberbia, de sentir y expresar, el entrañable sentimiento llamado agradecimiento. Vamos..., decir, por lo menos, gracias.
¿Cómo le explicas a la hidra metomentodo con cualquiera de sus múltiples cabezas? Que hay gente que hacen el bien sin mirar a quién. Y ya está, punto, porque son buenas y nada más.
No es mi caso, ni el tuyo, claro está, yo, moza, y tú también, hace muchos años que le vimos las patas y las cabezas a este ser sanguinario que envilece lo que toca y que, lo único que tiene bueno, son palabritas. Nada más.
Que la Virgen de Finibus o la que nació en Magdala, nos protejan siempre de el como han hecho hasta ahora.
¡Gracias, mujeres!
Salud.
¿Pero tú no eras agnostico?