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Mano dura, cuentos chinos,
¡vaya tándem!
Desde ya.-Dice el baranda,
y problema solucionado
porque esto está arreglado
y no queremos a esta panda.
Hagan cola señorías.
En fila de uno y sin colarse
que no hacen falta porfías
ni necesidad de pegarse.
Primero las lideresas,
luego los engominados
seguidos de los de las iglesias
y sus cirios perfumados.
Compro, cambio, vendo,
sesenta euros dos catedrales
con su contenido de dentro
mas diez actos sacramentales.
Son de regalo:
Nos dice el bien trajeado
al que un amiguito del alma
una pasta le ha donado
para que esté bien callado.
¡Hale joh!
Dice el gallego
al que secunda el castellano
en eso de poner la mano
y hacer dinero de estraperlo.
Malaya sea el caballero
sin una barca en Marbella,
unas bolsas con dinero
y a quien no arrulle una estrella.
Reinaguremos la Gran Vía
y en el oasis mediterráneo
hagamos juegos de invierno,
porque es una tontería
no aprovechar el interregno
entre gloria e infierno.
Catetos y hipotenusas,
obras, tranvías, diagonales,
los cuarenta principales,
Ali Babá y sus excusas.
¡Caso cerrado! Aulló el juez
arreando a la mesa un mazazo.
Vamos todos contra él
que éste es un tío pelmazo
que aún no se ha enterado
que todo está bien atado
ni quién ejerce el poder
en este país degradado
donde quien no manga es un gil
y quien trabaja un desgraciado.
Salud.
Mano dura, cuentos chinos,
¡vaya tándem!
Desde ya.-Dice el baranda,
y problema solucionado
porque esto está arreglado
y no queremos a esta panda.
Hagan cola señorías.
En fila de uno y sin colarse
que no hacen falta porfías
ni necesidad de pegarse.
Primero las lideresas,
luego los engominados
seguidos de los de las iglesias
y sus cirios perfumados.
Compro, cambio, vendo,
sesenta euros dos catedrales
con su contenido de dentro
mas diez actos sacramentales.
Son de regalo:
Nos dice el bien trajeado
al que un amiguito del alma
una pasta le ha donado
para que esté bien callado.
¡Hale joh!
Dice el gallego
al que secunda el castellano
en eso de poner la mano
y hacer dinero de estraperlo.
Malaya sea el caballero
sin una barca en Marbella,
unas bolsas con dinero
y a quien no arrulle una estrella.
Reinaguremos la Gran Vía
y en el oasis mediterráneo
hagamos juegos de invierno,
porque es una tontería
no aprovechar el interregno
entre gloria e infierno.
Catetos y hipotenusas,
obras, tranvías, diagonales,
los cuarenta principales,
Ali Babá y sus excusas.
¡Caso cerrado! Aulló el juez
arreando a la mesa un mazazo.
Vamos todos contra él
que éste es un tío pelmazo
que aún no se ha enterado
que todo está bien atado
ni quién ejerce el poder
en este país degradado
donde quien no manga es un gil
y quien trabaja un desgraciado.
Salud.