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ALMENDRAL: Tío, ¿no hay otro sitio en todo Badajoz para zamparte...

Tío, ¿no hay otro sitio en todo Badajoz para zamparte un bocata de jamón?, ¿sabes? Quizá no sea mala idea la de ese tabernero con mostacho y cara de palo avinagrada. Me refiero a construir una muralla en torno a Catalunya, igual que la que han hecho los israelíes en su territorio, la diferencia es que allí la han hecho ellos para que no le entren otros y, aquí, la harían señores como el que tú describes, con la cabeza hecha de leña y corcho.
También se puede cercar con una valla electrificada con alto voltaje. P`que aprendan esos que se alimentan gracias a la despensa de Europa, que son más tontos..., ¡mira que ser los que más pagan de toda España y los que menos reciben a cambio! Por cierto, ¿te enteraste cuánto aporta la despensa a las arcas del Estado? ¿Cuánto recibe?
Claro que, igual no es tan buena idea eso de la valla o cercado, porque.., ¿y si los hijos y nietos de los catameños, andalanes, castelanos, catalegos y muchos otros de otras partes del mundo y de las Españas mismo, se enfadan un poco y rompen el bloqueo por los Pirineos o el mar y a su vez, cortan los suministros que tan generosamente aportan a la fuerza y por aquello de la solidaridad mal entendida?
Quien dice los hijos y nietos, puede decir los naturales del País hayan nacido en el o no.
No escribo más que me estoy cabreando y luego se vuelve negro mi ectoplasma.
Mocita canta conmigo:

Para hacer esta muralla,
tráiganme todas las manos:
Los negros, su manos negras,
los blancos, sus blancas manos.
Ay,
una muralla que vaya
desde la playa hasta el monte,
desde el monte hasta la playa, bien,
allá sobre el horizonte.
— ¡Tun, tun!
— ¿Quién es?
—Una rosa y un clavel...
— ¡Abre la muralla!
— ¡Tun, tun!
— ¿Quién es?
—El sable del coronel...
— ¡Cierra la muralla!
— ¡Tun, tun!
— ¿Quién es?
—La paloma y el laurel... 
— ¡Abre la muralla!
— ¡Tun, tun!
— ¿Quién es?
—El alacrán y el ciempiés...
— ¡Cierra la muralla!
Al corazón del amigo,
abre la muralla;
al veneno y al puñal,
cierra la muralla;
al mirto y la yerbabuena,
abre la muralla;
al diente de la serpiente,
cierra la muralla;
al ruiseñor en la flor,
abre la muralla...
Alcemos una muralla
juntando todas las manos;
los negros, sus manos negras,
los blancos, sus blancas manos.
Una muralla que vaya
desde la playa hasta el monte,
desde el monte hasta la playa, bien,
allá sobre el horizonte..
Salud.