![La fuente del parque](/fotos_reducidas/2/4/4/00029244.jpg)
Mil perdones te pido moza recia,
creía que los cárnicos sabían,
que hay cerdos que emanan más poesía
que los puercos que se esconden cada día
tras las faldas de la buena clerecía.
Fariseos, ganapanes, tragabuches;
siempre hubo, y te juro,
que los he lidiado de todos los colores,
pero estoy en condiciones de decir,
sin acudir a fábulas manidas,
sean de Samaniegos o de escribas,
de fariseos o de tahúres
que en el mundo ateo hay,
mal que les pese,
conocimientos y sapiencias suficientes,
para hacerles entender algún día,
que su mundo obsoleto y carca
es una carga, que padecen con paciencia
los que aún negando, reconocen,
el vacío que dejó el crucificado.
Los provechos obtenidos por marranos,
las gabelas alcanzadas por los zánganos,
los daños infringidos a los humanos,
y todo en nombre,
de ese Ser, que en su boca es un pecado.
Salud.
creía que los cárnicos sabían,
que hay cerdos que emanan más poesía
que los puercos que se esconden cada día
tras las faldas de la buena clerecía.
Fariseos, ganapanes, tragabuches;
siempre hubo, y te juro,
que los he lidiado de todos los colores,
pero estoy en condiciones de decir,
sin acudir a fábulas manidas,
sean de Samaniegos o de escribas,
de fariseos o de tahúres
que en el mundo ateo hay,
mal que les pese,
conocimientos y sapiencias suficientes,
para hacerles entender algún día,
que su mundo obsoleto y carca
es una carga, que padecen con paciencia
los que aún negando, reconocen,
el vacío que dejó el crucificado.
Los provechos obtenidos por marranos,
las gabelas alcanzadas por los zánganos,
los daños infringidos a los humanos,
y todo en nombre,
de ese Ser, que en su boca es un pecado.
Salud.