"UN HORIZONTE OSCURO"
Antonio Morales Moya, catedrático emérito de Historia contemporánea de la Universidad Carlos III de Madrid no cree “que la visión actual sobre la Historia de España sea pesimista. Más bien los viejos paradigmas que la articulaban -permanente decadencia, continuo fracaso- y que han gravitado hasta fechas cercanas sobre los historiadores españoles parecen superados. La restauración democrática daba cumplimiento al sueño regeneracionista. Es cierto, sin embargo, que a día de hoy, el horizonte de la nación española se vislumbra oscuro y que el viejo fantasma de la desunión surge de nuevo. La imagen de España ha ido cambiando, más siempre se ha mantenido fuerte y atractiva. Después de la Leyenda Negra que creó el mito de un Estado absolutista, gobernado por monarcas tiránicos e impedido por la Inquisición de participar y contribuir al progreso europeo y, que contamina, incluso, a la Europa ilustrada, el Romanticismo, con la Guerra de la Independencia, impulsó otra leyenda, la de la ¿luminosa España? que cantaron Shelley y Byron”.
Luis Ribot, catedrático de Historia Moderna de la UNED rechaza sin miramientos los complejos patrios: “En ámbitos como la organización política, la expansión oceánica y la colonización, la cultura, el pensamiento o la creación artística, España ha tenido una indudable relevancia y protagonismo. Al igual que en la Historia de otros países, ha habido luces y sombras, pero no hay nada que justifique una visión pesimista de conjunto. Lo más dañino ha sido la interiorización atormentada -y enfermiza- de las visiones más negativas, como si la nuestra fuera una Historia sustancialmente distinta y peor que otras. La normalización de la Historia de España nos muestra la semejanza básica entre el proceso histórico español y los de los países de nuestro ámbito geográfico y cultural, y esto no es que lo diga yo, en la biblioteca nacional de Madrid y reunidos barios intelectuales, catedráticos, historiadores, llegaron ha ponerse de acuerdo para poder decir que la historia de España esta fuera de todas las especulaciones sombras y dudas, pero que todavía hay algunos que siguen mareando la perdiz como si nuestra querida Empaña no tuviera una gran historia, y que no solo se fundamente en la maldita guerra civil.
Un saludo:
Antonio Morales Moya, catedrático emérito de Historia contemporánea de la Universidad Carlos III de Madrid no cree “que la visión actual sobre la Historia de España sea pesimista. Más bien los viejos paradigmas que la articulaban -permanente decadencia, continuo fracaso- y que han gravitado hasta fechas cercanas sobre los historiadores españoles parecen superados. La restauración democrática daba cumplimiento al sueño regeneracionista. Es cierto, sin embargo, que a día de hoy, el horizonte de la nación española se vislumbra oscuro y que el viejo fantasma de la desunión surge de nuevo. La imagen de España ha ido cambiando, más siempre se ha mantenido fuerte y atractiva. Después de la Leyenda Negra que creó el mito de un Estado absolutista, gobernado por monarcas tiránicos e impedido por la Inquisición de participar y contribuir al progreso europeo y, que contamina, incluso, a la Europa ilustrada, el Romanticismo, con la Guerra de la Independencia, impulsó otra leyenda, la de la ¿luminosa España? que cantaron Shelley y Byron”.
Luis Ribot, catedrático de Historia Moderna de la UNED rechaza sin miramientos los complejos patrios: “En ámbitos como la organización política, la expansión oceánica y la colonización, la cultura, el pensamiento o la creación artística, España ha tenido una indudable relevancia y protagonismo. Al igual que en la Historia de otros países, ha habido luces y sombras, pero no hay nada que justifique una visión pesimista de conjunto. Lo más dañino ha sido la interiorización atormentada -y enfermiza- de las visiones más negativas, como si la nuestra fuera una Historia sustancialmente distinta y peor que otras. La normalización de la Historia de España nos muestra la semejanza básica entre el proceso histórico español y los de los países de nuestro ámbito geográfico y cultural, y esto no es que lo diga yo, en la biblioteca nacional de Madrid y reunidos barios intelectuales, catedráticos, historiadores, llegaron ha ponerse de acuerdo para poder decir que la historia de España esta fuera de todas las especulaciones sombras y dudas, pero que todavía hay algunos que siguen mareando la perdiz como si nuestra querida Empaña no tuviera una gran historia, y que no solo se fundamente en la maldita guerra civil.
Un saludo: