Item más y ahora ya copiando y pegando que creo que es gerundio:
Pero ojo al dato que ya sale a relucir Salvaleón.
Una serie de acontecimientos precipitaron que Fernando II diera un impulso definitivo a la reconquista de la Transierra. La debilidad del antiguo emirato de Badajoz fue aprovechada por el caballero portugués Geraldo de Sempavor para apoderarse de las plazas de Évora, Trujillo, Montánchez, Serpa y Urumeña, llegando incluso a sitiar Badajoz en 1169 con la ayuda del rey portugués Alfonso I Enríquez. Enterado Fernando II de lo que pasaba en la Transierra y para evitar que los lusos le cortaran la expansión de su reino hacia el sur, se vio obligado a luchar contra los musulmanes y los portugueses
Después de partir el rey leonés con todo su ejército desde Ciudad Rodrigo, pasaron la Sierra de Gata por el puerto de Perosín (Puerto de los Perales), donde el rey ordenó que parte de su ejército, con gran número de templarios,
se dirigiese hacia la Sierra de Eljas. En esta incursión, junto a la frontera portuguesa, se conquistaron fortalezas tan importantes como Trevejo, Eljas, Salvaleón, Bernardo, Benavente y Peñas Sequeros. Una vez conquistadas estas plazas este ejército se dirigió hacia Coria, punto de reunión de todas las tropas. Ciudad en posesión cristiana desde 1142 cuando la conquista Alfonso VII (rey de Castilla y León).
Mientras tanto, Fernando II con el resto del ejército, en el que también figuraban tropas templarias, se dirigió a la izquierda desde Gata conquistando Almenara y San Juan de Mascoras (Santibáñez el Alto), reducto importantísimo
y bien defendido. Tomó entonces rumbo a Coria atacando la plaza de Milana, enclave estratégico situado entre el río Arrago y la ribera de Gata, junto a Moraleja.
El peso del Temple en esta incursión fue importante si tenemos en cuenta el gran número de donaciones con que les premió el rey leonés. De esta primera fase de la campaña obtienen San Juan de Mascoras (Santibáñez), Milana, Benavente, Trevejo y Bernardo (Castel Bernardo). Sin embargo, la documentación que hemos manejado solamente confirma que pasaron al Temple las tres primeras.
Pero ojo al dato que ya sale a relucir Salvaleón.
Una serie de acontecimientos precipitaron que Fernando II diera un impulso definitivo a la reconquista de la Transierra. La debilidad del antiguo emirato de Badajoz fue aprovechada por el caballero portugués Geraldo de Sempavor para apoderarse de las plazas de Évora, Trujillo, Montánchez, Serpa y Urumeña, llegando incluso a sitiar Badajoz en 1169 con la ayuda del rey portugués Alfonso I Enríquez. Enterado Fernando II de lo que pasaba en la Transierra y para evitar que los lusos le cortaran la expansión de su reino hacia el sur, se vio obligado a luchar contra los musulmanes y los portugueses
Después de partir el rey leonés con todo su ejército desde Ciudad Rodrigo, pasaron la Sierra de Gata por el puerto de Perosín (Puerto de los Perales), donde el rey ordenó que parte de su ejército, con gran número de templarios,
se dirigiese hacia la Sierra de Eljas. En esta incursión, junto a la frontera portuguesa, se conquistaron fortalezas tan importantes como Trevejo, Eljas, Salvaleón, Bernardo, Benavente y Peñas Sequeros. Una vez conquistadas estas plazas este ejército se dirigió hacia Coria, punto de reunión de todas las tropas. Ciudad en posesión cristiana desde 1142 cuando la conquista Alfonso VII (rey de Castilla y León).
Mientras tanto, Fernando II con el resto del ejército, en el que también figuraban tropas templarias, se dirigió a la izquierda desde Gata conquistando Almenara y San Juan de Mascoras (Santibáñez el Alto), reducto importantísimo
y bien defendido. Tomó entonces rumbo a Coria atacando la plaza de Milana, enclave estratégico situado entre el río Arrago y la ribera de Gata, junto a Moraleja.
El peso del Temple en esta incursión fue importante si tenemos en cuenta el gran número de donaciones con que les premió el rey leonés. De esta primera fase de la campaña obtienen San Juan de Mascoras (Santibáñez), Milana, Benavente, Trevejo y Bernardo (Castel Bernardo). Sin embargo, la documentación que hemos manejado solamente confirma que pasaron al Temple las tres primeras.