En los años posteriores el
castillo de Xerez de
Badajoz pasó a manos de portugueses, quienes mantuvieron la fianza de
plazas y fuertes hasta 1330. Juan Alfonso de Castilla fue señor de
Jerez de los Caballeros, aproximadamente, desde febrero de 1342 hasta noviembre de 1344, y también aparece con el título de «señor de Xerez-Badajoz» en el documento donde se consignó la donación de Caravaca a la Orden de Santiago,