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LA HABA: Que la Envidia, la Ira, la Avaricia y la Soberbia,...

Que la Envidia, la Ira, la Avaricia y la Soberbia, sean cuatro pecados capitales mortales de necesidad y con billete condenatorio sin remisión de pena (salvo pasando por el Purgatorio), es más que aceptable; porque además del sufrimiento propio pudieran inflingir un daño añadido al prójimo. Pero que estén consideradas la Gula, la Pereza y la Lujuria al mismo nivel de malignidad, a mí no me cabe en la cebeza.

Si existe el Infierno yo iría a él por glotón, pero sería una lástima. Así que de "callos a la zamorana", oído, que pongan dos raciones. Estoy caminando entre Cotines, Villafáfila, Villadefrade, y vosotros jimplando con el comer. Y yo, viajando, dándole vueltas a la cabeza. Pero cómo es posible, me pregunto, que el comer/dormir/... er (Gula/Pereza/Lujuria), estén asimilados a los cuatro vicios antes citados. Entiendo que estas tres facultades humanas deberían declararse virtuosas por placentereas, y, desde luego, segregarse de ese septeto del mal capital.

Pensando en comer callos a la zamorana, que es gula, a continuación puedo andar por Villafáfila, que es curar la pereza; y despues puedo....., que es matar la lujuria; y así matar tres pájaros de un tiro ¿no?. Francamente, los pecados capitales deberían reducirse a cuatro. Lo único pernicioso que veo en reiterar los callos a la zamorana es mi imagen. Hoy, antes de cenar, me estoy mirando al espejo con unos simples calzoncillos blancos y unos patéticos calceites negros por todo atuendo: ¿Habrá cosa más ridícula que un hombre puesto así? Y me digo: "Leganés, eres lo que pareces, una aceituna con dos palillos de dientes".

Pero bastante condena es arrastar este cuerpo por aquí para que, además, te condenen Allí.

¡Marchando dos de callos!.

Saludos,
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Leganés que la envidia, la ira, la abaricía, y la soberbia, sean cuatro pecados capitales. Es cierto yo no creo que por buen comer de la buena cocina, tenga que ir uno al infierno, por que entonces estariamos muchos, sin hacer daño a nadie.
Por los buenos manjares que tienen nuestra Extremadura, cuando habláis de los callos, con patatas y morcillas de vientre, que buena que es tan, me recuerdo de Antonio el carnicero que tenia la carnicería al la do de la plaza también de los bocalanos que uno de ... (ver texto completo)