Quiero jabeñear un poco pero no sé con qué: ayer invité, a una chica, a viajar gratis al pasado y no me ha contestado ninguna viajera (viajera de viajar, no de las de Casi). A ver si mi buen amigo Pepe Romero, JEJEJEJEJEJE, nos dice cuál es la canción apropiada para hacer ese viaje virtual, porque “Con su blanca palidez” no ha merecido respuesta por parte de ninguna jabeña: venga coño, ¡Mujeres a mí, que soy presa fácil!
Ana, ¿va a haber hoguera este año en la noche de San Juan?, antes era estupendo, la saltábamos una y otra vez hasta chamuscarnos de rescoldos y cenizas. Mira, esta es una idea que el otro día (si es que no se hace ya) debí de recordarle al Sr. Alcalde: es cosa barata enjaretar una buena parva de leña y pegarla fuego. Recuerdo que cuando yo era un niño, el campeón de estos saltos era Joselillo “el de Baldomero”, cómo saltaba el jodío, también era el campeón jugando a “entera”: qué risa, las culás y los espoliques, ¿es que nadie se acuerda? Tú Paco, o tú Rebolla-El pajón, ¿no tenéis nada que decir?
Recuerdo cuando llegué por primera vez a Barcelona, a trabajar, creo que fue en 1968, y me fui a una pensión en la calle Londres, 8l –casi esquina a Muntaner-, era la noche de San Juan y la ciudad estaba que bullía. Entonces había en Monjuit lo que se llamaba “El Pueblo Español”, era el punto de encuentro esa noche de toda aquella juventud (ya mezcla de castellanos y catalanes). Se quemaba pólvora a raudales, uno que venía de ver la traca de la Velá con Ntra. Sra. en medio de aquella rueda de fuego, viendo aquello se quedaba anonadado. Ya de madrugada la costumbre era montarse en un tren que recorría la costa (Barcelona, Badalona, Mataró, Calella, Blanes….. Lloret, y otros muchos pueblos entremedio) donde, por lo visto, los jóvenes se iban apeando para ver amanecer en la playa; pero como yo no tenía un clavel me volví a la pensión cabizbajo y pensando –porque entonces era así, habitación doble con un extraño- ¿quién demontre me habrá tocao de compañero? Abro la habitación, que era grande y en el centro tenía una mesa camilla, y me encuentro a un joven descojonándose de risa sólo, yo no sabía por qué, y el mu maricón, al verme la cara de susto que yo debía tener, más risa todavía, una carcajá tras otra. Hasta que le entró hipo, al mu cabrón, y dejó de reírse; y entonces yo le pregunté lo que se preguntaba siempre: “Tú, ¿de dónde eres?”, y me dijo que era palentino: y otra vez que se desgüevaba de risa. Yo estaba perdío, porque no le entendía lo que me hablaba entre risas, cuando caí en la cuenta que era PALESTINO, no palentino. Me eché en la cama, al rato me hice el dormío –con más miedo que vergüenza- y el tío es que se partía el culo de la risa, hasta que –envuelto en humo- cayó exhausto el mu cabrón y con la cabeza apoyada en la mesa-camilla pasó toda la noche: sin saberlo, había asistido por primera y última vez a ver los efectos que producía fumarse varios porros seguidos. Ese fue mi “aterrizaje” catalán, una noche de San Juan.
En fin, Ana, Alcalde, ¿Hay lumbre o no?
Buenas noches a todos,
Ana, ¿va a haber hoguera este año en la noche de San Juan?, antes era estupendo, la saltábamos una y otra vez hasta chamuscarnos de rescoldos y cenizas. Mira, esta es una idea que el otro día (si es que no se hace ya) debí de recordarle al Sr. Alcalde: es cosa barata enjaretar una buena parva de leña y pegarla fuego. Recuerdo que cuando yo era un niño, el campeón de estos saltos era Joselillo “el de Baldomero”, cómo saltaba el jodío, también era el campeón jugando a “entera”: qué risa, las culás y los espoliques, ¿es que nadie se acuerda? Tú Paco, o tú Rebolla-El pajón, ¿no tenéis nada que decir?
Recuerdo cuando llegué por primera vez a Barcelona, a trabajar, creo que fue en 1968, y me fui a una pensión en la calle Londres, 8l –casi esquina a Muntaner-, era la noche de San Juan y la ciudad estaba que bullía. Entonces había en Monjuit lo que se llamaba “El Pueblo Español”, era el punto de encuentro esa noche de toda aquella juventud (ya mezcla de castellanos y catalanes). Se quemaba pólvora a raudales, uno que venía de ver la traca de la Velá con Ntra. Sra. en medio de aquella rueda de fuego, viendo aquello se quedaba anonadado. Ya de madrugada la costumbre era montarse en un tren que recorría la costa (Barcelona, Badalona, Mataró, Calella, Blanes….. Lloret, y otros muchos pueblos entremedio) donde, por lo visto, los jóvenes se iban apeando para ver amanecer en la playa; pero como yo no tenía un clavel me volví a la pensión cabizbajo y pensando –porque entonces era así, habitación doble con un extraño- ¿quién demontre me habrá tocao de compañero? Abro la habitación, que era grande y en el centro tenía una mesa camilla, y me encuentro a un joven descojonándose de risa sólo, yo no sabía por qué, y el mu maricón, al verme la cara de susto que yo debía tener, más risa todavía, una carcajá tras otra. Hasta que le entró hipo, al mu cabrón, y dejó de reírse; y entonces yo le pregunté lo que se preguntaba siempre: “Tú, ¿de dónde eres?”, y me dijo que era palentino: y otra vez que se desgüevaba de risa. Yo estaba perdío, porque no le entendía lo que me hablaba entre risas, cuando caí en la cuenta que era PALESTINO, no palentino. Me eché en la cama, al rato me hice el dormío –con más miedo que vergüenza- y el tío es que se partía el culo de la risa, hasta que –envuelto en humo- cayó exhausto el mu cabrón y con la cabeza apoyada en la mesa-camilla pasó toda la noche: sin saberlo, había asistido por primera y última vez a ver los efectos que producía fumarse varios porros seguidos. Ese fue mi “aterrizaje” catalán, una noche de San Juan.
En fin, Ana, Alcalde, ¿Hay lumbre o no?
Buenas noches a todos,
Buenas tardes a todos, pues si Leganes te respondo que si hay hoguera de San Juan, como el año pasado habra un recorrido desde la casa de cultura hasta el campo de futbol protagonizada por la butaca del medio y la asociacion de mujeres, allì despues de la hoguera hay una barra donde se podra beber y tambien creo que hay barbacoa. Paco me ha encantado tù reflexiòn, me has emocionado y has echo que se me salten las lagrimas, pero si me aceptas te doy un consejo, dile lo que piensas y sientes a aquellas personas que quieres, ahora, en el presente porque a lo mejor el dia que quieras expresar tus sentimientos es demasiado tarde, igual que te expresas escribiendo no dudo que lo puedes hacer hablando, demuestra lo que piensas tambien en echos y en comportamientos dìa a dìa porque muchas veces gusta màs un gesto o un acto que las palabras. Un saludo