LA HABA: Ni me ofende ni me molesta, querida Victoria, a mí...

bueno pedro, yo creo que no ha dicho sr. bermejo con ánimo de ofender, es una manera de hablar. cuando vamos a un bar aunque sea conocido muchas veces nos dicen con media sonrisa, que le pongo al sr,?.
en cuanto lo que le dices a mari nieves, tienes toda la razón, estamos cogiendo la costumbre de estar pendiente tol santo dia del dichoso móvil. parece que no había vida antes de el, y yo diría que es entonces cuando la había por que ahora parecemos zombis, toos con la cabeza baja pendientes del cacharro, que ya suena hasta en misa. que tengas buenas noches, lo mismo que los demás.

Ni me ofende ni me molesta, querida Victoria, a mí me poséis llamar como queráis, como yo nunca me llamo, incluso me resulta novedoso. El tema de la incomunicación daría para largo, pero tengo una deformación intelectual debido, supongo, a mi amistad con algunos psicólogos y abogados que coinciden en señalar la falta de comunicación como la causa principal del final de los sentimientos, las rupturas de las parejas y la extinción de la llama del deseo. Las formas mediáticas en la globalización contemporánea, además de ser aliadas de los poderes autocráticos, promueven la incomunicación, y resultan un instrumento de control poderoso para adocenar a las masas, guiarlas, espiarlas y vaciar sus emociones. Gozamos de menos intimidad que nunca, y el observador inteligente es desde hace tiempo consciente de que lo mejor una vida; las experiencias, las creencias, la sensibilidad, las tradiciones, los mitos, las ideas, las interpretaciones, las intuiciones, la lírica, la pasión y los sueños, es lo que separa a un ser humano inteligente de un autómata. Emoción es todo aquello que penetra por los sentidos, mantengamos a flor de piel nuestros órganos sensoriales, no vivamos con la creencia de que un aparató electrónico de última generación nos hará más libre, por el contrario, sólo será un eslabón más en nuestra larga cadena de esclavitud.

Un abrazo