Buena a tod@s, voy a comenzar parodiando el anuncio promocional de una serie de restauración de coches antiguos en la versión española:
¡Leganés ¡la qas liao ….
Si bien puedo seguir comprobando la escasa participación activa en el foro, te puedo afirmar que por el postigo del mismo, se asoman hasta los burros cuando pasan por la calle.
En estos días de tu relato por partes, he oigo comentarios y anhelos de la próxima entrega de las personas que menos me podía imaginar que siguieran el foro. He constatado que lo siguen desde aquellos que lo hacen por seguir las nuevas tecnologías y pellizcan y repellizcan la pantalla de su superteléfono, para agrandar la fuente y enterarse de todo detalle, pasando por los corrillos de mujeres que lo comentan barriendo sus puertas y tratando de poner cara a ese tal Antonio que escribe en internet y hasta por personas ya mayores que ofrecen sus otras versiones y acicates a la historia pues la han oído de nuevo por el run run que transita el pueblo.
Mi enhorabuena, mi enhorabuena Leganés por el relato y por la forma de hacerlo, dada la cercanía relativa de los personajes y el tiempo transcurrido ya que en el estilo no entro por no entender del tema.
Antonio
¡Leganés ¡la qas liao ….
Si bien puedo seguir comprobando la escasa participación activa en el foro, te puedo afirmar que por el postigo del mismo, se asoman hasta los burros cuando pasan por la calle.
En estos días de tu relato por partes, he oigo comentarios y anhelos de la próxima entrega de las personas que menos me podía imaginar que siguieran el foro. He constatado que lo siguen desde aquellos que lo hacen por seguir las nuevas tecnologías y pellizcan y repellizcan la pantalla de su superteléfono, para agrandar la fuente y enterarse de todo detalle, pasando por los corrillos de mujeres que lo comentan barriendo sus puertas y tratando de poner cara a ese tal Antonio que escribe en internet y hasta por personas ya mayores que ofrecen sus otras versiones y acicates a la historia pues la han oído de nuevo por el run run que transita el pueblo.
Mi enhorabuena, mi enhorabuena Leganés por el relato y por la forma de hacerlo, dada la cercanía relativa de los personajes y el tiempo transcurrido ya que en el estilo no entro por no entender del tema.
Antonio
Gracias, Antonio, muchas gracias de corazón. Aparte de agradecido por tu más que generoso reconocimiento, me contenta verificar -por la constatación personal que me trasladas- que buena parte del jabeñerío tenga interés en asomarse a esta ventana virtual que, a diferencia de los balcones que fabrican los albañiles, siempre ofrece un paisaje cambiante que depende de la imaginación de los foreros intervinientes. Yo tengo muy reiterado aquí que no escribo ni para convencer ni siquiera para persuadir, sino solo para entretener: así que si con ello, como me dices, a mi vecina Ana “la de Valentín”, es un decir, uno de mis escritos le arranca una sonrisa (o le produce sosiego, o cualesquiera otras sensaciones de esas que plantan cara al tedio), para mí ya ha valido la pena ayudar a mantener vivo este Foro Jabeño.
En cuanto a la formas de escribir, permíteme la vanidad (de la que nadie estamos exentos) de arrogarme también la cansina letanía de pedir hasta la extenuación a los paisanos que escriban como Dios les dé a entender, como quieran o como sepan, ¿o es que no nos entendemos sin complejos con nuestro hablar tan jabeño sin que nadie nos reproche cómo lo hacemos? Pues nada, me siento impotente para conseguir atraerlos/as. Bien es verdad, porque a mí también me pasa, y le pasó hasta al mismísimo J. L. Borges, que con aspirar a ser buen lector y conseguirlo, se siente uno plenamente satisfecho. Y añado que el lenguaje, sea hablado o escrito -antes que para alimentar egos o para el lucimiento- es un instrumento para comunicarnos y entendernos de la mejor manera con nuestros semejantes.
Te ruego muy encarecidamente, estimado tocayo, que no dejes de pasar de vez en cuando por aquí. Con mis mejores deseos para ti y para tu familia, me despido hasta mejor vernos, sanos y salvos, en la Velá.
Un abrazo,
En cuanto a la formas de escribir, permíteme la vanidad (de la que nadie estamos exentos) de arrogarme también la cansina letanía de pedir hasta la extenuación a los paisanos que escriban como Dios les dé a entender, como quieran o como sepan, ¿o es que no nos entendemos sin complejos con nuestro hablar tan jabeño sin que nadie nos reproche cómo lo hacemos? Pues nada, me siento impotente para conseguir atraerlos/as. Bien es verdad, porque a mí también me pasa, y le pasó hasta al mismísimo J. L. Borges, que con aspirar a ser buen lector y conseguirlo, se siente uno plenamente satisfecho. Y añado que el lenguaje, sea hablado o escrito -antes que para alimentar egos o para el lucimiento- es un instrumento para comunicarnos y entendernos de la mejor manera con nuestros semejantes.
Te ruego muy encarecidamente, estimado tocayo, que no dejes de pasar de vez en cuando por aquí. Con mis mejores deseos para ti y para tu familia, me despido hasta mejor vernos, sanos y salvos, en la Velá.
Un abrazo,