Situada a orillas del río Guadiana, en una zona central de la región extremeña. Es uno de los hitos más importantes en las comunicaciones norte-sur del oeste penisular, a través de la Vía de la Plata.
Mérida es una ciudad que se asienta sobre un gran yacimiento arqueológico, fruto de la ocupación estable de su solar durante más de dos mil años. Incluso antes de la fundación de la antigua ciudad romana, la vega del río Guadiana proporcionaba fértiles tierras, con abundante caza y pesca, que favoreció el asentamiento de pueblos prehistóricos.

Alcalde Antonio Rodríguez Osuna (PSOE-Extremadura)

Mérida conserva multitud de vestigios arqueológicos, entre los que cabe destacar:
TEATRO.- Fue construido en los años 16-15 a. C. y su donante fue el "Ministro Universal" de Augusto, su yerno Marco Vipsanio Agrippa. No obstante sufrió varias remodelaciones, considerándose la más importante la realizada en el periodo final de los Flavios (siglos I-II d. C), fue entonces cuando se edificó todo el graderío y el pórtico posterior de la escena. Otra reconstrucción fue en los años 333-335 d. C. A esta segunda edificación correspondería la monumental fachada de la escena. La tercera restauración (siglo IV d. C.), comprende la nueva calle que rodea el monumento.
ANFITEATRO.- Inaugurado el año 8 a. C., y reformándose buena parte de él en la época flavia o quizás en la de Trajano. Era en este edificio donde se organizaban los juegos, destacando las luchas de gladiadores entre sí y con fieras salvajes.
ACUEDUCTOS.- El de "Los Milagros", que debe su nombre al raro equilibrio en que se veían algunos de sus pilares, y cuya misión era salvar el desnivel del río Albarregas, para que así pudieran llegar a la ciudad las aguas procedentes del embalse de Proserpina. El de "San Lázaro", situado junto al Circo Romano, reconstruido en el siglo XVI, hoy se encuentra bastante derruido, quedando en pie tres pilares solamente.
CASA ROMANA.- Construida en la segunda mitad del siglo I a. C. Su estructura es la del tipo de casa patricia, señorial, con un patio central rodeado de galerías, con peristilo, sobre las cuales se abren las diversas habitaciones; cuenta con termas privadas.
ARCO DE TRAJANO.- Situado en la que fuera calle principal en la época romana, llamada Cardus Maximus, servía de ornato.
PUENTES.- El puente sobre el río Guadiana es un de los de más longitud. Pero no menos importante es el que se encuentra sobre el río Albarregas.
Y además, calzadas, necrópolis, alcazaba, concatedral de Santa María, basílica de Santa Eulalia, Palacio de los Mendoza, Palacio del Conde de los Corbos, Conventual Santiaguista, Monasterio de las Freylas de Santiago, exconcento de Santo Domingo, etc., etc.

Museo de la Prehistoria

Museo del Ferrocarril

Museo de la Muñeca y el Juguete

Museo del Agua, ubicado junto al embalse de Proserpina

Carnaval Romano de Mérida: en febrero.

Semana Santa de Mérida: marzo-abril.

La ciudad de Mérida tiene la llamada feria que lleva el mismo nombre de la ciudad y que se realiza entre el 1 de septiembre hasta el 7 del mismo mes.

Santa Eulalia de Mérida, tiene lugar el 10 de diciembre. Fiesta de marcado carácter religioso en la que se conmemora el martirio de Santa Eulalia, patrona de la ciudad.

Emérita Lúdica: en junio. Fiesta en el que se recrea el pasado romano de la ciudad por sus calles y monumentos con mercados, teatro y danza, recreaciones históricas y diversas actividades gastronómicas y culturales.

Platos típicos de Mérida
Ensaladas: zorongollos, cojondongo, jilimojas.
Gazpacho extremeño.
Migas extremeñas.
Carnes de cordero asado o guisado.
Caldereta de cordero.
Cardincha de paleta de borrego.
Conejo al estilo de Mérida.
Escabeches con peces de río.
Revueltos de espárragos trigueros.

A finales del siglo I a. C. Publio Carisios, por orden del emperador Octavio Augusto, decidió asentar a los soldados veteranos de las Legiones V Alaudae y X Gemina en el año 25 a. C. sobre la antigua y estratégica población emeritense situada en el centro de la región extremeña y a orillas del río Guadiana. Dominada la península por los romanos, éstos la dividirían en tres provincias: Bética, Tarraconense y Lusitania, siendo la capital de esta última, Mérida, conocida desde ese momento como Emérita Augusta. Durante siglos y hasta la caída del Imperio romano de Occidente, Mérida fue un importantísimo centro jurídico, económico, militar y cultural, siendo esta capital uno de los dos centros administrativos romanos más importantes del Occidente Peninsular. Los suevos, en el siglo V, instalaron en Mérida la capital de su reino, al igual que posteriormente lo harían los visigodos, dando con ello continuidad e importancia política, económica y cultural. La llegada de los árabes a la península y la pronta ocupación de la capital visigoda por las tropas de Muza traerá consigo el declive de la ciudad, en comparación con etapas anteriores. A principios del siglo XIII, en 1230, las tropas cristianas de Alfonso IX conquistarán la ciudad y Mérida se convierte en sede del Priorato de San Marcos de León de la Orden de Santiago, junto con Llerena. Será en época de los Reyes Católicos cuando la ciudad inicie una recuperación política motivada por el apoyo del Maestre de Santiago don Alfonso de Cárdenas, defensor de la causa de Isabel la Católica en su lucha por la corona con Juana la Beltraneja. Por su situación fronteriza con Portugal, se verá envuelta en continuas refriegas y batallas en época de los Austria y Borbones, sin ningún beneficio ni político ni económico. La invasión francesa supondrá para Mérida una lamentable pérdida de parte de su patrimonio histórico artístico, así como el parón económico que se inció a finales del siglo XVIII. Finalmente, la situación como nudo ferroviario de Mérida y el paso de las décadas de este siglo, han convertido a la ciudad en un núcleo industrial y de servicio en alza, contribuyendo a su desarrollo el interés por parte de arqueólogos e instituciones regionales y provinciales en sacar a la luz la inmensa riqueza arqueológica que afortunadamente cada año se viene recuperando, dando con ello más que motivos suficientes para que su conjunto arqueológico sea declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Desde principios de los años 80, Mérida fue elegida capital de la Comunidad Autónoma de Extremadura, lo que le ha supuesto un cambio importante en infraestructuras destinadas al servicio público de los ciudadanos extremeños y para los miles de visitantes que anualmente visitan sus monumentos o asisten a los actos culturales de fama internacional.

Crónica de un viaje a Mérida

Semana Santa de Mérida: marzo-abril. Declarada de Interés Turístico Nacional.

Ruta de la Tapa