Factura rebajada un 25%

puerta de entrada al escenario en el teatro romano, MERIDA

Detrás del frons scaenae hay varias dependencias para los actores que constituyen el postcaenium. En el paramento del podio de este cuerpo se ha apreciado una cierta falta de unidad, lo que se ha interpretado como la muestra de una importante reforma de la scaena original. El momento de esta reforma se ha aventurado atendiendo a las esculturas toracatas, propias del reinado de Domiciano (81-96 d. C.), y a los capiteles del frons scaenae, cuyo estilo es propio de la etapa de la dinastía Flavia (segunda mitad del siglo I d. C.). Tiempo después, según consta en una inscripción, el teatro sufrió reformas durante el reinado de Constantino I entre los años 333 y 337, cuando también se intervino en el circo de la ciudad. Esta intervención se llevó a cabo como parte de un programa de mejoras cuando Mérida se convirtió en 298 en capital de la Diócesis de Hispania, creada durante la reorganización administrativa del imperio durante el reinado de Diocleciano. Tito Flavio Domiciano, comúnmente conocido como Domiciano, fue emperador del Imperio romano desde el 14 de octubre de 81 hasta su muerte el 18 de septiembre de 96. Fue el último emperador de la dinastía Flavia, la cual reinó sobre el Imperio romano desde el año 69 hasta el año 96 y abarcó los reinados de su padre, Tito Flavio Vespasiano (69-79), de su hermano mayor Tito (79-81) y finalmente el suyo propio (81-96). Por dinastía Flavia se conoce una casta de emperadores romanos. Comprendió a tres gobernantes que ocuparon el trono 27 años, lo que hizo de ella la más corta de las dinastías de emperadores romanos. Los tres pertenecieron a la gens romana de los Flavia. Flavio Valerio Aurelio Constantino (Naissus, 27 de febrero de c. 272 – Nicomedia, Bitinia y Ponto, 22 de mayo de 337) fue Emperador de los romanos desde su proclamación por sus tropas el 25 de julio de 306, y gobernó un Imperio romano en constante crecimiento hasta su muerte. Se le conoce también como Constantino I, Constantino el Grande o, en la Iglesia ortodoxa, las Iglesias ortodoxas orientales y la Iglesia católica bizantina griega, como san Constantino. El circo romano de Mérida es un antiguo recinto para carreras de carros que construyeron los romanos en la colonia romana de Augusta Emerita —actual Mérida (España)— a principios del siglo I d. C., pocas décadas después de la fundación de la ciudad. Erigido extramuros de la ciudad y con una planta ovalada de unos 440 m de longitud por 115 m de ancho, este circo fue uno de los más importantes de todo el Imperio Romano después el Circo Máximo de Roma. Con la oficialización del cristianismo en el siglo IV d. C. comenzó el declive de los espectáculos en el circo, pero se cree que estuvo en uso hasta el siglo VI. Después de muchos siglos de abandono, del edificio se conservan las ruinas de sus cimientos, que dejan adivinar sus dimensiones, aunque es uno de los pocos recintos de este tipo que se pueden contemplar en toda su planta. Desde 1993, el circo es Patrimonio de la Humanidad según la Unesco como parte del Conjunto arqueológico de Mérida. La Diocesis Hispaniarum fue una de las diócesis del Imperio romano que existieron durante el Bajo Imperio. Fue creada por el emperador romano Diocleciano cuando este realizó la reorganización política del territorio del Imperio romano. Diocleciano, nacido con el nombre de Diocles, fue emperador de Roma desde el 20 de noviembre de 284 hasta el 1 de mayo de 305. Nacido en una familia iliria de bajo estatus social, fue escalando puestos en la jerarquía militar hasta convertirse en el comandante de la caballería del emperador Caro. Tras la muerte de Caro y de su hijo Numeriano en campaña en Persia, Diocleciano fue proclamado emperador por el ejército. Consiguió acceder al trono tras un breve enfrentamiento con Carino, el otro hijo del emperador Caro, en la batalla del Margus, y su llegada al poder puso fin a la crisis del siglo III.
(18 de Abril de 2019)