Buenas noches Inesita, como te llamaba mi madre, es cierto que te quería muchísimo te tenía un cariño inmenso. Se llevaba tan bien con tu madre que más que una vecina la consideraba como de la familia. ¡Qué tiempos! Un verdadero ejemplo de lo que debe ser una buena amistad bien entendida. Por supuesto que puedes quedártela.
Un abrazo y recuerdos de Dami.
Un abrazo y recuerdos de Dami.