Hermano, ¿ves los gatitos que cara de golositos tienen mirando el pescado. Dentro se ve a la Chati. Esta foto se la hice a las nueve de la tarde y la pesamos, pesó 20 kg., pero fué capturada a las nueve de la mañana, la trajo a su casa, regresó al puesto, debajo del "cerro gordo", y se encontro prendida la más pequeña que pesó, creo recordar, 9 kg., tuvimos huevas para tres meses y pescado como en una matanza. Hola, primo Deme. ¡Vaya juego de palabras qué has montado!
De esa anécdota que cuentas, las tenía mi padre a miles. Yo no sé como podía tener tanta paciencia para pasar tantas horas a la orilla del río...
Unas veces con suerte y otras (muchas), sin ella. Prima, ¡vaya trofeos que tiene ahí mi tío! Esta anécdota para va todos los foreros amantes de la pesca: Mis vecinos Antonio R. Timoteo, Luis etc. etc.
Recuerdo de pequeño, tendría unos 12 años, me fui con él de pesca a los castrejones de la villa, yo viéndole a él con ese arte de tirar la caña y recoger los frutos del embalse, me quise embarcar en su aventura, tiraba la caña y nada, pero amiga, en un cierto momento ¡milagro! tiro la caña y pesco un pez, ¿pero como venía? con el anzuelo clavado en... Mira, Antonio, eso lo pescaba mi padre.