Hasta las gaviotas no se querían perder la
fiesta que en la mañana de hoy teníamos organizada en el
pantano, y sobre volaban nuestras cabezas, como diciéndonos, con bien se acabe esto ya, y nos volváis a dejar volar tranquilas por nuestra hábitat natural, y es que el ser humano, somos así lo invadimos todo y sin permiso, con lo tranquilas que estarían las gaviotas grullas y patos, antes de ser invadidos por el ser humano, jejeje, pues que las zurcen