Braulito, pues la he llevado a las cuatro, porque entrenan de cuatro a seis, luego a las seis me dira a que hora juega, o si les toca descansar esta semana, porque como son impares los equipos, cada semana descansa uno.
Amigo, pues echate una siestilla, que hoy has madrugado mucho, mira la campa, se levanta a las once y se va aprender aleman, vuelve a las once y cuarto y come y se acuesta de doce a tres, se levanta hace cafe y se echa la
siesta hasta las seis.