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La representación del nacimiento de Jesús es una costumbre en los hogares españoles, aunque en los últimos años se ha visto desplazada por otros motivos decorativos importados de otros países, como por ejemplo el árbol de Navidad. En Latinoamérica el portal de Belén también es una costumbre muy extendida donde fue introducida por nuestros colonizadores.
Según diferentes versiones, la primera representación del portal de Belén se le atribuye a San Francisco de Asís, y tubo lugar en Italia por el siglo XIII d. C. Esta representación del portal de Belén fue viviente con mula y buey incluidos, donde participaron vecinos de la localidad de Greccio, se dice que San Francisco construyó un portal de madera y paja donde se represento la escena del nacimiento. La costumbre se extendió por otras localidades y finalmente paso a los hogares Italianos donde se representaba la escena con figuras de distintos materiales.
Otra versión dice que la costumbre proviene del siglo XV, en la localidad de Napoles, donde dicen, se elaboró las primeras figuras del Belén y que el rey Carlos III fue quien extendió la costumbre por España.
Otra versión se dice que provino de la costumbre de que en los antiguos hogares cristianos donde tenian retablos o pequeños altares para las oraciones y en los que estaría colocadas la figuras del Misterio
Según diferentes versiones, la primera representación del portal de Belén se le atribuye a San Francisco de Asís, y tubo lugar en Italia por el siglo XIII d. C. Esta representación del portal de Belén fue viviente con mula y buey incluidos, donde participaron vecinos de la localidad de Greccio, se dice que San Francisco construyó un portal de madera y paja donde se represento la escena del nacimiento. La costumbre se extendió por otras localidades y finalmente paso a los hogares Italianos donde se representaba la escena con figuras de distintos materiales.
Otra versión dice que la costumbre proviene del siglo XV, en la localidad de Napoles, donde dicen, se elaboró las primeras figuras del Belén y que el rey Carlos III fue quien extendió la costumbre por España.
Otra versión se dice que provino de la costumbre de que en los antiguos hogares cristianos donde tenian retablos o pequeños altares para las oraciones y en los que estaría colocadas la figuras del Misterio
