EL PAÑUELO (mixto)
QUÉ SE NECESITABA.
Un pañuelo.
DÓNDE SE JUGABA
En la calle o en la plaza.
CUÁNTOS JUGABAN
No había límites.
CÓMO SE ECHABA.
Como se trataba de hacer dos grupos de jugadores con el mismo número de ellos en cada grupo, se podía utilizar, por ejemplo el modo de “Pares o nones”. Esto consistía en que, cada vez dos niños, se ponían las manos atrás y cuando uno de ellos decía: –“ ¿Pares ó nones?”. El otro elegía una de las dos opciones. Los dos sacaban una mano con los dedos que cada uno creía conveniente, extendidos. Se contaban los dedos de los dos y si correspondía a lo que cada uno había pedido, elegía grupo el primero. Porque un grupo era de los pares y otro de los nones.
CÓMO SE JUGABA
Los dos grupos se ponían a una distancia de unos 20 metros. En el medio se colocaba el capitán con el pañuelo colgando en la mano de su brazo extendido. Antes habían quedado de acuerdo a qué grupo iba a nombrar primero: “Primero voy a nombrar a los de mi derecha”. Se numeraba cada miembro de los grupos y se hacía un pequeño esfuerzo para recordar el número que tenía cada uno. El capitán llamaba a todos que tuvieran mucha atención. Y decía: “El uno y el cinco”. Entonces los niños correspondientes salían corriendo hacia donde estaba el capitán con el pañuelo. Si uno llegaba antes cogía el pañuelo y regresaba a su sitio y el otro se salía del juego. Si llegaban los dos a la vez hacían pequeños intentos de coger el pañuelo y al menor descuido del otro, lo cogía y emprendía veloz carrera hacia su sitio; pero el que no lo había cogido le perseguía y si conseguía tocarle antes de llegar el primero a su destino, éste era el que se salía del juego.
Ganaba el grupo que más jugadores conservaba y perdía el que más jugadores habían salido del juego.
QUÉ SE NECESITABA.
Un pañuelo.
DÓNDE SE JUGABA
En la calle o en la plaza.
CUÁNTOS JUGABAN
No había límites.
CÓMO SE ECHABA.
Como se trataba de hacer dos grupos de jugadores con el mismo número de ellos en cada grupo, se podía utilizar, por ejemplo el modo de “Pares o nones”. Esto consistía en que, cada vez dos niños, se ponían las manos atrás y cuando uno de ellos decía: –“ ¿Pares ó nones?”. El otro elegía una de las dos opciones. Los dos sacaban una mano con los dedos que cada uno creía conveniente, extendidos. Se contaban los dedos de los dos y si correspondía a lo que cada uno había pedido, elegía grupo el primero. Porque un grupo era de los pares y otro de los nones.
CÓMO SE JUGABA
Los dos grupos se ponían a una distancia de unos 20 metros. En el medio se colocaba el capitán con el pañuelo colgando en la mano de su brazo extendido. Antes habían quedado de acuerdo a qué grupo iba a nombrar primero: “Primero voy a nombrar a los de mi derecha”. Se numeraba cada miembro de los grupos y se hacía un pequeño esfuerzo para recordar el número que tenía cada uno. El capitán llamaba a todos que tuvieran mucha atención. Y decía: “El uno y el cinco”. Entonces los niños correspondientes salían corriendo hacia donde estaba el capitán con el pañuelo. Si uno llegaba antes cogía el pañuelo y regresaba a su sitio y el otro se salía del juego. Si llegaban los dos a la vez hacían pequeños intentos de coger el pañuelo y al menor descuido del otro, lo cogía y emprendía veloz carrera hacia su sitio; pero el que no lo había cogido le perseguía y si conseguía tocarle antes de llegar el primero a su destino, éste era el que se salía del juego.
Ganaba el grupo que más jugadores conservaba y perdía el que más jugadores habían salido del juego.