ACEITERA (niños)
QUÉ SE NECESITA
Un cinturón
DÓNDE SE JUGABA
En la calles, en las plazas, en los solares…
CUÁNTOS JUGABAN
Ocho ó diez niños.
CÓMO SE ECHABA
De cualquier manera para que, al final, se quedara uno. Antes de echar se elegía a un Capitán. Una forma pudiera ser esta:
Puestos en corro, el Capitán iba señalando con el dedo a cada uno mientras decía: Detrás-de-una-mata-había-dos-c onejos-el –uno –era-blanco-el otro-era-negro-los-pegué-un –tirito—y –a-los-dos-maté-paja-rito-lito -lito ¿Dónde-vas-tan-re-bonito- ¿A- la-era-verdadera-botón-botera— canita-y ¡AFUERA ¡.
El niño que estaba señalado cuando se decía esta última palabra se salvaba. Se repetía hasta quedar solo uno que era el quedado.
Esta forma de echar se llamaba: DETRÁS DE UNA MATA…
CÓMO SE JUGABA.
El quedado metía la cabeza entre las piernas del Capitán que permanecía de pie. Los otros estaban alrededor. El Capitán decía la siguiente “letanía” y todos tenían que hacer lo que se indicase:
Aceitera (todos dan un golpecito en la espalda del quedado)
Vinagrera (otro golpecito)
Al ras con ras (planeo de palmas sobre la espalda)
Amagar pero no dar (todos amagan y si alguno toca, se queda)
Dar sin reir (golpecito y el que se ría, se queda)
Dar sin hablar (otro golpe y el hable se queda)
Pegar un pellizquito (se pegaba un pellizco en el culo)
Y echar a volar (todos corrían despavoridos para todos lados pues en este momento, el quedado, con el cinturón les perseguía para pegarles.
Después de un rato de persecución el capitán decía en voz alta:
¡ARRECOMPÍNCHAMELE ¡
En este momento se volvían las tornas y, el quedado, salía corriendo hacia donde estaba el Capitán buscando protección pues el resto se convertían en perseguidores y trataban de cogerle para pegarle golpes en todos lados.
QUÉ SE NECESITA
Un cinturón
DÓNDE SE JUGABA
En la calles, en las plazas, en los solares…
CUÁNTOS JUGABAN
Ocho ó diez niños.
CÓMO SE ECHABA
De cualquier manera para que, al final, se quedara uno. Antes de echar se elegía a un Capitán. Una forma pudiera ser esta:
Puestos en corro, el Capitán iba señalando con el dedo a cada uno mientras decía: Detrás-de-una-mata-había-dos-c onejos-el –uno –era-blanco-el otro-era-negro-los-pegué-un –tirito—y –a-los-dos-maté-paja-rito-lito -lito ¿Dónde-vas-tan-re-bonito- ¿A- la-era-verdadera-botón-botera— canita-y ¡AFUERA ¡.
El niño que estaba señalado cuando se decía esta última palabra se salvaba. Se repetía hasta quedar solo uno que era el quedado.
Esta forma de echar se llamaba: DETRÁS DE UNA MATA…
CÓMO SE JUGABA.
El quedado metía la cabeza entre las piernas del Capitán que permanecía de pie. Los otros estaban alrededor. El Capitán decía la siguiente “letanía” y todos tenían que hacer lo que se indicase:
Aceitera (todos dan un golpecito en la espalda del quedado)
Vinagrera (otro golpecito)
Al ras con ras (planeo de palmas sobre la espalda)
Amagar pero no dar (todos amagan y si alguno toca, se queda)
Dar sin reir (golpecito y el que se ría, se queda)
Dar sin hablar (otro golpe y el hable se queda)
Pegar un pellizquito (se pegaba un pellizco en el culo)
Y echar a volar (todos corrían despavoridos para todos lados pues en este momento, el quedado, con el cinturón les perseguía para pegarles.
Después de un rato de persecución el capitán decía en voz alta:
¡ARRECOMPÍNCHAMELE ¡
En este momento se volvían las tornas y, el quedado, salía corriendo hacia donde estaba el Capitán buscando protección pues el resto se convertían en perseguidores y trataban de cogerle para pegarle golpes en todos lados.