Ofertas de luz y gas

ORELLANA LA VIEJA: ¡DE JIRA ¡...

¡DE JIRA ¡

Dice la Real Academia de la Lengua que Jira es: “ banquete o merienda, especialmente campestres, entre amigos, con regocijo y bulla”.
Nuestro pueblo ha sido de siempre muy aficionado a esta clase de salidas al campo, donde los amigos (las “partías”), se lo pasan en grande comiendo y bebiendo, catando y bailando.
Ha pasado la Semana Santa y el Domingo de Resurrección donde todo el pueblo ha asistido a la procesión de “El Encuentro” (hoy “La Enramá”) y nos preparamos para otro día grande: el Lunes de Pascua, que es el día de la jira, de “La Función”. Se prepara comida abundante: tortillas, toda clase de embutidos, los avíos para la caldereta, vino, gaseosas “La Molinera”, cervezas y refrescos. Hace días que los grupos, bien de familias amigas bien de mozos y mozas de las mismas “partías”, se han puesto de acuerdo dónde pasar este día.
Antes de construir el pantano la mayoría iba a la orilla del río Guadiana que atravesaban por los vados, la barca o la misma presa de la Molineta: al Molino Viejo, los encinares de “el Monte la Barca”, al Coto, al Molino de Forraje…Después es debajo de la presa donde la gente va. Otros iban cerca de los manantiales, como la fuente “Picón” y donde hubiera arboleda para buscar la sombra y se pudieran proveer de leña para guisar. Algunos optan por las casas de Palazuelo o del “Lejío Acera”. Se va provisto de instrumentos musicales, de balones, sogas, calderos y las bestias van cargadas con todo lo necesario.
El camino de ida es una fiesta, como todo el día. La gente va contenta y alegre porque todo está a favor para pasar un día extraordinario:
“Ya vamos a la “función”
Al río allá, al río allá…”
Al llegar al sitio elegido, los expertos hacen la lumbre y comienzan a preparar la caldereta. Mientras, los jóvenes bailan y cantan al son de acordones, guitarras o se divierten en los más variados juegos: tirar de la soga, partidillos de fútbol, se cuentan chistes, se hacen “gracietas “ y todo el mundo se divierte. A los niños se les ha hecho el imprescindible columpio en la rama de una encina y corre la bota de vino de unas manos a otras sin parar. Por la tarde con estómagos llenos y las cabezas calientes, suele entrar una modorra que la gente pasa debajo de los árboles. Pero todavía queda tiempo y ganas de comerse las chuletas asadas en la parrilla. Después se recogen las cosas, se aparejan y cargan las bestias y se emprende el regreso a Orellana. Los ánimos no han decaído y en el camino se entonan canciones del estilo de estas:
“Venimos de la Función
Del río allá, del río allá.
Venimos de la Función
De comernos un borrego
Si no lo “querís” creer
Aquí traemos los cuernos.

“Nuestra “partía “ es
La que más pita
Porque traemos a lo mejor,
Porque traemos a la “Carpita”
“pa” que nos toque el acordeón”.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Buenas tardes Don Antonio.
Le hacia yo a usted por Orellana. Bueno, tú vas muy de vez en cuando. Dejalos que esten todos allí con el jaleo, que ya irémos nostros más despacio.
Un abrazo Antonio