¡Qué si! que tienen buena pinta, pero cómo los
churros que hace Jose el marido de Sisuka, ninguno. ¡Vamos! esque ni en el
color se parecen... por cierto hoy hemos cenado churros con café, una cena muy típica desde siempre, en la tarde
noche de los domingos en Orellana.
Saludos Antonio.