Hay un dicho, con ironía, para dudar de la seguridad de algo que dice: eres más seguro que el "destinto" (instinto) de la Porrilla. Cuentan que un día la tal Porrilla y dos vecinas, estaban haciendo bollos. A la hora de llevarlos al horno, se dieron cuenta que tenian dos tablas y ellas eran tres. Como para llevar una tabla a la cabeza se necesitan dos personas, estaban cabilando como las llevarían, si llamar a otra, o hacer dos viajes al horno. La Porrilla, muy diligente ella, propuso: Yo tengo mucho "destinto", así que vosotras os poneis una detrás y otra delante y yo me pongo en medio sujetándo las dos, que yo tengo mucho "destinto". Y así lo hicieren y con mucho cuidado iban hacia el horno cuándo se les cruzó una conocida que le preguntó algo a la Porrilla; ésta se paró a contestar sin darse cuénta que la compañera que iba delante sujetando la primera tabla, no se percató y siguió andando y claro, la tabla y los bollos acabaron en el suelo. "pero, Porrilla, ¿tú no tenias mucho "destinto"? A ve pero m´esaío el santo al cielo.