ya, eso lo he vivido yo trabajaba en madrid, y la verdad tiene sus pros y sus contras, la calidad de viva que ahi aqui no se puede comparar sobre todo en paz y tranqulidad, pero en aburrimiento ni te cuento.
se echa de menos los largos
paseos por el
campo, los pic-nic... me encanta el campo, menos mal ke el
pueblo de Emilio (mi marido) no está lejos de aki y la verdad el rato ke vas te relajas un monton, aunke estos dias de
lluvia y frio no sales de
casa, el lunes ¡otra vez a la carga!