La temeridad acompaña a la juventud, como acompaña la prudencia a la vejez.
Que no se sequen tus lágrimas, porque se secarán los ríos de tu alma.
La soledad es el
precio de la libertad.
precio de la libertad.
No hay en la tierra contento
que se iguale a alcanzar
la libertad perdida.
que se iguale a alcanzar
la libertad perdida.
El libro que no soporta
dos lecturas no merece ninguna.
dos lecturas no merece ninguna.
Siempre hay un poco de
locura en el amor, pero
siempre hay un poco de
razón en la locura.
locura en el amor, pero
siempre hay un poco de
razón en la locura.
En la desesperanza y en la melancolíade tu recuerdo, Soria, mi corazón se abreva
La vida es demasiado corta como para perder una parte preciosa fingiendo.
La cobardía es el miedo consentido; el valor es el miedo dominado.
No hay más realidad que la imagen ni más vida que la conciencia.
La buena conciencia es la mejor almohada para dormir.
La muerte no llega más que una vez, pero se hace sentir en todos los momentos de la vida.