SAN PEDRO DE MERIDA: Algo para mitigar el hambre de los pobres....

Algo para mitigar el hambre de los pobres.

¡COCINAR CON AMOR!

PAELLA
Con el garbo de un experto, se pelan bien las cigalas
es el menester requerido para hermano sin corbata,
qué bueno me queda el trago de una bota preparada
con el libar de estos caldos los apetitos se esparzan,
quiera el Diablo que esta paella se recocine con arte.
GAMBAS
Con tesón y buen hacer siguen las gambas peladas
que se preparan con tiempo para que no falte nada,
cuando se mezclen sabores de paella bien guisada
por manos del bien hacer, de personas enseñadas
que igual te guisa un pollino, que caracoles de lata.
SEPIAS
En el rincón del guisado sigue la entrega de sepias
hay que sobarlas tan bien y sacar las tintas negras,
para no se entremezclarlos con sabores de paellas
se tienen que trocear entre unas manos expertas,
para que esparzan su jugo con aceites de primera.
ALIÑOS
Pimientos, cebollas y ajos se recortan en cazuelas
para que luego se mezclen dentro de esa paellera,
sartén con volumetría de yantar hasta una docena
son sibaritas de hombres y los vinos son reservas,
se añade un poco azafrán, pa los que liban la cena.
ACEITE
Estando todo dispuesto, emprendemos la guisada
de aceite de oliva extra se vierten diez cucharadas,
ahora volcamos adentro, esos aliños que espantan
dejándolos macerar con la sepias, gamba y cigalas,
cuando se ponen rojizas, luego hay que separarlas.
ARROZ
Cada cuatro personas, doscientos gramos de arroz
hay que rehogarlo con vuelta, con el aliño anterior,
para que empape en la pulpa lo mejor de su sabor
una vez bien empapado, es el tiempo de empezar,
la cocción del todo ello con las gambas ya peladas.
CALDO
añadir un caldo de pecado, para que cueza tan bien
la seña de la casa de primicias paelleras del comer,
cuando ese caldo se inserte, el doble de arroz será
cocerlo bien diez minutos hasta que el caldo se va,
después se apartará del calor, adornarla y a comer.
FUEGO

Autor:
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
26 noviembre 2011