Quien no recuerda al tio Manuel el de la fabrica, todas las tardes tenian que ir los guardas del campo a tirar de la correa para poner en marcha el motor de gasogeno, que movia el alternador para dar electricidad al pueblo con una tension de 125 voltios, de vez en cuando se venia abajo y la luz parecia un candil. Funcionaba con gas pobre producido por una combustion incompleta del picon. Algun que otro dia se ponia en marcha mas temparano para escuchar en los receptores de radio algun partido de ... (ver texto completo)