Hola a todos:
Hoy voy a contar una anécdota que quizás alguno de vosotros la recuerde, si es así me gustaría que me lo hicierais saber.
Hace un montón de años estaba yo en el cabezo, cuando se paró el que hoy es mi cuñado Enrique, montado en su moto GUCCI . Yo ni corta ni perezosa le dije que me dejara dar una vuelta ( yo jamás había cogido una moto) él me dijo que bueno, me dio unas cuantas instrucciones y allí que salí yo disparada como alma que huye, sin darme casi ni cuenta ya había pasado el parque y seguía adelante pensando como dar la vuelta, os aseguro que no me atrevía a hacerlo pues veía muy estrecha la carretera y tenía miedo de que se me parara y no pudiera volver a ponerla en marcha. El caso es que después de mucho pensarlo, ( pues ya había llegado a la caseta de los guardiñas ) lo intenté y me salió bien. Cuando por fín aparecí en el cabezo, ya lo sabía todo el pueblo incluido mi padre, os podéis imaginar la que se había armado pues pensaban que me hubiera podido pasar algo.
La reprimenda y castigo por parte de mi padre no la recuerdo, pero seguro que por lo menos unos pocos de días estuve castigada.
Bueno por hoy ya está bien.
Un saludo
Charo
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Hoy voy a contar una anécdota que quizás alguno de vosotros la recuerde, si es así me gustaría que me lo hicierais saber.
Hace un montón de años estaba yo en el cabezo, cuando se paró el que hoy es mi cuñado Enrique, montado en su moto GUCCI . Yo ni corta ni perezosa le dije que me dejara dar una vuelta ( yo jamás había cogido una moto) él me dijo que bueno, me dio unas cuantas instrucciones y allí que salí yo disparada como alma que huye, sin darme casi ni cuenta ya había pasado el parque y seguía adelante pensando como dar la vuelta, os aseguro que no me atrevía a hacerlo pues veía muy estrecha la carretera y tenía miedo de que se me parara y no pudiera volver a ponerla en marcha. El caso es que después de mucho pensarlo, ( pues ya había llegado a la caseta de los guardiñas ) lo intenté y me salió bien. Cuando por fín aparecí en el cabezo, ya lo sabía todo el pueblo incluido mi padre, os podéis imaginar la que se había armado pues pensaban que me hubiera podido pasar algo.
La reprimenda y castigo por parte de mi padre no la recuerdo, pero seguro que por lo menos unos pocos de días estuve castigada.
Bueno por hoy ya está bien.
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Charo
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