Los orígenes de
Villar de Rena se remontan a tiempos de los
romanos, cuyo enclave ciertos autores estaría situada en la antigua Lacipea
romana, mansión y lugar de descanso (de ahí seguramente deriva el nombre de Villar, es decir,
casas de
campo o de descanso de las huestes
romanas) en la
vía que se dirigía a Caesar Augusta (
Zaragoza). Otros Autores sin embargo creen que estaría enclavadas en la antigua Regina.
Hacia finales del siglo XII, la repoblación llevada a cabo por los cristianos en este tierra se llevaría a cabo por los orden de los templarios, constituyéndose un territorio dependiente del señorío de de la Comunidad de Villa y Tierra siendo la población principal Medellín, y al Obispado de Plasencia, alcanzando la categoría de Villa Exenta en 1735 pero teniendo que esperar de hecho hasta el año 1811 para que Villar de Rena fuera totalmente independiente, años de la desaparición de Señorío del condado de Medellín.
A la caída del Antiguo Régimen la localidad se constituye en municipio constitucional en la región de
Extremadura. Desde 1834 quedó integrado en el Partido judicial de
Villanueva de la Serena. En el censo de 1842 contaba con 75 hogares y 237 vecinos