En una segunda fase, iniciada en 1605 y que dura cuatro años, se edifica una galería para unir el
palacio a la cercana
iglesia de
Santa Marina y se reedifica ésta. Juan de Herrera de Maliaño fue un arquitecto, matemático, geómetra y
militar español, considerado uno de los máximos exponentes de la
arquitectura renacentista hispana.