Para hacerlo, basta ser cliente del
Parador, o sea, tomarse un café en el
patio y después, ascender a la
torre para hacerse una idea del
paseo tan bonito que nos espera. Esa es la palabra: bonita.
Zafra es una ciudad bonita. Sales del Parador y enfrente nos encanta la
casa-
palacio de los marqueses de Solanda, bello ejemplar de la
arquitectura romántica española inspirada en el estilo islámico.