ACEBO: ¡Hola Acebanos! últimamente este foro está un poco...

¡Hola Acebanos! últimamente este foro está un poco calentito, mucha y mala politica diria yo (tanto por una parte, como por otra). En la alcaldia de mi pueblo hoy esta gobernando un alcalde de un partido politico, que a mi particularmente no me gusta, pero creo que ha sido elegido democraticamente y tendré que apechugar con lo que hay. Por que hablais de votos comprados con artimañas y engaños. Yo, Dios me libre, no tengo ninguna simpatia por el PP, pero creo que si han llegado a la alcaldia como comentais, osea, con compra de votos, no es ahora cuando hay que pelear, eso se hace antes de que esos votos lleguen a las urnas, además, si hay personas que se dejan comprar, ya son mallorcitos para saber lo que hacen. Ahora es momento de seguir de cerca las acciones del nuevo gobierno del ayuntamiento y no consentir todo lo que estais diciendo que hacen, con criticar no se consigue nada, hay que demostrar lo que se critica y poner solución a la misma.

Hablais de la depuradora, de jevero, de la escuela, de las lindes de tierra., hace tanto que no voy a Acebo, que no imagino tanto desastre como comentais, pero estoy segura que no es tanto como decis, ni tan poco como yo quiero imaginar.

La primera vez que estube en Acebo (no soy del pueblo) tenia yo unos 7 años y lo primero que me llamó la atención fue lo bonito que se veia el cielo estrellado desde mi ventana en casa de mi abuelo, y desde entonces nunca en ningun otro sitio he visto un cielo tan bonito, negro como el azabache con perlitas de brillantes, me dijo mi abuelo. Al día siguiente, me abuelo me llevó al huerto que tenia por aquellos días y despues a Jevero, que rio, que bonito, que . Todabia hoy enmudezco con lo que vi esa primera vez. Conocí a vuestras gentes ese año y en años posteriores y el recuerdo que tengo es de gente afable, cariñosa, buena gente en una palabra.

Por eso, hoy me cuesta creer que hableis del mismo pueblo que yo tengo en mi memoria, no puede ser cierta tanta envidia, malos rollos, et.

Acordaros: No hay rosas sin espinas.