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Vuela, vuela, gaviota,
vuela surcando los mares,
y cuéntame de otros mundos,
lo que de tu corazón sale.
No te vuelvas gaviota,
sin traerme las noticias,
que yo te estaré esperando,
Date prisa, date prisa.
Gaviota peregrina, que vuela,
al filo del viento,
no te arredres gaviota,
y métete mar adentro.
Cuando empieza a amanecer,
tu "voz" se hace sonar,
¿Qué bién viniste a traer,
del otro lado del mar?
vuela surcando los mares,
y cuéntame de otros mundos,
lo que de tu corazón sale.
No te vuelvas gaviota,
sin traerme las noticias,
que yo te estaré esperando,
Date prisa, date prisa.
Gaviota peregrina, que vuela,
al filo del viento,
no te arredres gaviota,
y métete mar adentro.
Cuando empieza a amanecer,
tu "voz" se hace sonar,
¿Qué bién viniste a traer,
del otro lado del mar?
Siempre me gustaron este estilo Arbertiano de poesía... Yo de tierra adentro viajaba con mi imaginación, incentivado por el misterio del querer "volar".
Un abrazo.
Un abrazo.