Buenos días
No puedo estar más de acuerdo con Horus de lo que está él consigo mismo y eso me deja una vez más, perplejo. Amigo, parece que cada vez que hablas das en el clavo, escepto por un par de cositas. No puedes juzgar a la gente por el grado de ilusión que ponen en las cosas o en los actos que realizan. La libertad, conseguida con grandes esfuerzos y no por Delacroix precisamente, es exactamente eso, la capacidad que cada uno tiene para tomar sus decisiones. Si la gente quiere votar, que vote y ahí nuestro amigo tesorero tiene razón. Yo nunca he sido partidario de no acudir a las urnas, independientemente de lo que se decida o del mayor o menor grado de decisión que pueda tener un voto, que a menudo es insignificante. Acudir a votar no es estar con el sistema, pues yo mismo estoy en total desacuerdo con la situación internacional, que a la postre es la causante de todos los males económicos, como bien se ha apuntado en otros mensajes. Ahora se trata de elegir a aquellos que deben regir nuestros destinos económicos y por supuesto, siempre, a priori, es mejor un buen gestor. La duda surge cuando hay que elegir entre dos malas alternativas. De todos modos quedan las otras opciones. Hay mucha razón en eso de que los que alientan el no votar son de extrema: derecha los que buscan sacar mayores distancias a sus oponentes, y de izquierda los que saben que no tienen nada que hacer. A menudo, los extremos se tocan.
¡Cuánta razón tiene Elmaestro!
Buenos días Alagón, donde quiera que esteis.
No puedo estar más de acuerdo con Horus de lo que está él consigo mismo y eso me deja una vez más, perplejo. Amigo, parece que cada vez que hablas das en el clavo, escepto por un par de cositas. No puedes juzgar a la gente por el grado de ilusión que ponen en las cosas o en los actos que realizan. La libertad, conseguida con grandes esfuerzos y no por Delacroix precisamente, es exactamente eso, la capacidad que cada uno tiene para tomar sus decisiones. Si la gente quiere votar, que vote y ahí nuestro amigo tesorero tiene razón. Yo nunca he sido partidario de no acudir a las urnas, independientemente de lo que se decida o del mayor o menor grado de decisión que pueda tener un voto, que a menudo es insignificante. Acudir a votar no es estar con el sistema, pues yo mismo estoy en total desacuerdo con la situación internacional, que a la postre es la causante de todos los males económicos, como bien se ha apuntado en otros mensajes. Ahora se trata de elegir a aquellos que deben regir nuestros destinos económicos y por supuesto, siempre, a priori, es mejor un buen gestor. La duda surge cuando hay que elegir entre dos malas alternativas. De todos modos quedan las otras opciones. Hay mucha razón en eso de que los que alientan el no votar son de extrema: derecha los que buscan sacar mayores distancias a sus oponentes, y de izquierda los que saben que no tienen nada que hacer. A menudo, los extremos se tocan.
¡Cuánta razón tiene Elmaestro!
Buenos días Alagón, donde quiera que esteis.