Diria que muchas tardes de verano me vio en la sobremesa bajo su manto convertido en sombra para protejerme del calor. Esperando que callera una cria de Cernicalo Comun del nido, para adiestrarlo como mi primo Antonio tenia. No echo de menos esos veranos ni na.
Sres-as: a refrescarse en las piscinas del pueblo, o mejos aun en la cantera, o pantano (y si os atreveis en el rio) pero cuidao con las corrientes... Un saludo... Si este arbol hablara, la de cosas que nos diria...