Claro que es
Berzocana y la
plaza se reconoce de lejos, y la
iglesia, el cuartel y la
huerta donde jugaban a la petanca, como la echo de menos! allí he jugado siempre con mis hermanos y primos y ayudabamos a Tio Vidal y compañía a recoger las bolas, incluso algunas veces nos dejaban jugar, era estupendo y los niños de hoy se lo estan perdiendo, compartir las tardes con nuestros mayores era muy divertido y educativo.