Osea, que te columpiaste tan ricamente ¿no? En ese columpio di mi primer beso, fue maravilloso, no lo olvidare nunca ni a ella tampoco, todavia la quiero. En el reoyo hemos jugado y trillado muchas generaciones.Ahora por las noches, está condenado AL BOTELLON.Pobre reoyo.Pobre juventud. Estaba mas cuidado cuando estaba destinado para trillar.Ahora teneis que cuidarlo mas ALEVINES. Poner luces en el parque que no atinamos con los cubatas y nos pasamos de la raya.