Hasta ahora todos los vecinos compraban el pan de esta tahona sin problema ninguno pero debido a rencillas personales por parte del señor alcalde y allegados con la panificadora esto dejó de ser así y bien es cierto que ahora en el unico establecimiento donde pisa el señor alcalde se suministran el pan de siempre de esta tahona y otro pan que viene de alrededores para que el señor alcalde y sus subditos no pasen hambre y tengan un pan que llevarse a la boca.