El origen de Casares se remonta a los tiempos de los íberos y fenicios, encontrándose en los límites de los bástulos. En el cortijo de Alechipe se encuentran tres aras con inscripciones, que corresponde íntegramente a la ciudad de Lacipo, una de las más importantes del litoral malagueño. En el año 61 a. C., Julio César, de quien se deriva el nombre de la ciudad, utilizó los famosos baños de la Hedionda, para curarse con sus
aguas sulfurosas la enfermedad hepática que padecía. Sus propiedades curativas se hicieron famosas en toda Roma.
En el año 1361 Casares fue elegida como lugar de concentración de Pedro I de Castilla y el destronado rey de
Granada Mohamed V para iniciar la campaña que debía devolver el trono al monarca nazarí.
Durante el levantamiento morisco contra Felipe II en 1570, Casares fue el centro de las operaciones. En la
ermita de Nuestra Señora del Rosario del
Campo se reunieron los notables moriscos con el duque de
Arcos y se puso fin a la revuelta. El notario Blas Infante, considerado como "Padre de la Patria Andaluza" por el Parlamento de
Andalucía y el Congreso de los Diputados, nació en esta ciudad el 5 de julio de 1885, en el seno de una
familia adinerada.
En este
pueblo se sigue hablando en jurdanu, dialecto que viene del astur-leonés.