Este
pozo es de características similares al Cinojal y al "barrero" en cuanto a su construcción: techo abovedado con grandes
piedras cubiertas de tierra y
escaleras de entrada para coger el
agua. Éste está situado junto a
la era de Fco. Mangas y por eso es conocido también como el pozo del "lejío". Sobre él me contaba mi abuela un hecho curioso, que ella narraba como si hubiera ocurrido realmente. Me decía que hacía mucho tiempo pasó por él un señor que iba a
caballo desde Villanueva de la
Sierra hasta Granadilla. Al verlo se bajó a beber y, al separar unos limos para aclarar el agua, le pareció ver una cuerda verdosa enredada en ellos. Por curiosidad, empezó a tirar de ella comprobando que no se acababa y, cansado y teniendo ya un ovillo hecho, cogió una
piedra de la orilla y la cortó. En ese momento el ovillo saltó para dentro del pozo al tiempo que se oía una voz que decía: "ya me rompiste el encanto". Con este misterio, el señor reanudó su
camino por ello, me decía, se conoce también como el pozo de "el encanto de Villanueva". Durante la época de las trillas iba mucha gente a buscar agua con barriles o cántaros y también se acudía a él a por agua para el servicio de las
casas. Actualmente, como ven, está prácticamente abandonado.