Hoy, no sé porqué, me he acordado de la primera vez que estuve en El Gordo. Año 1973 ó 1974 Yo debía tener 11 ó 12 años. Llevaba varios meses con todo el cuerpo cubierto de costras, que me tenían que mojar con aguasal y arrancarlas. Era muy doloroso para mí. Alguien nos habló de un señor de El Gordo, que curaba con hierbas. Fuimos allí. Este señor la dio a mi madre unas hierbas y le explicó como prepararlas. Mientras estuve allí, aunque él hablaba con mis padres, me miraba de una forma, que a mí me asustó un poco.
Lo que sucedió, es que al volver a Madrid, mi madre preparó el líquido a base de hierbas, que tenía que untarme. Cuando fue a aplicármelo, no tenía ni una sola costra en mi cuerpo.
No sé por qué pasó esto. No sé si fueron esas miradas, no sé si fue sugestión por mi parte. No lo sé. Pero hoy tengo 59 años y todavía estoy enormemente agradecido a este señor de El Gordo.
Lo que sucedió, es que al volver a Madrid, mi madre preparó el líquido a base de hierbas, que tenía que untarme. Cuando fue a aplicármelo, no tenía ni una sola costra en mi cuerpo.
No sé por qué pasó esto. No sé si fueron esas miradas, no sé si fue sugestión por mi parte. No lo sé. Pero hoy tengo 59 años y todavía estoy enormemente agradecido a este señor de El Gordo.