Dejando la "placituela" por la
calle Palacio, que ha perdido el sabor añejo en muchas de sus
fachadas, a la altura del n.° 16 aparece la calle Cruceras. Sobre el n.° 32 de esta calle se accede a un amplio
rincón escondido "La
Huerta la Invierna". En este rincón se han desarrollado muchas y variadas actividades: desde platicar y jugar a las cartas las comadres en tardes otoñales soleadas, pasando por ser lugar adecuado para que los "mariscales" prestasen sus servicios a las bestias, hasta fundir las
campanas en repetidas ocasiones. Finaliza la calle Crucera en la calle Rodeo, a la que afluyen calle Molineros,
Nogales y Travesía Nogales, toponimias de la
Fuente de los Nogales. Sobresalen por
antigüedad las "
Casas Gemelas" números 16 y 18 y la número 20, destruida por un incendio, quedando solamente la entrada renacentista. Pero más allá de esta o aquella construcción, en
Garganta la Olla destaca el conjunto urbano. Son muchos los
rincones con encanto para admirar dando un bonito y tranquilo
paseo.
Calles estrechas,
balcones de madera, entramados de madera y cuidadas
flores y macetas por doquier para disfrutar de un pausado paseo.