Fueron tan tristes tus últimos momentos,
que aún sin fuerzas para hablar en aquél
largo pasillo de urgencias, suplicabas POR FAVOR....
Me muero... Tus pulmones saturados por tu débil estado,
no tenían fuerzas para recibir ese soplo de vida.
Te fuiste quedando dormida tranquila y con una tenue sonrisa….
La conservo en mi retina, con ella, sigo pensando por que
con certeza lo creo, que regresabas aquí a tu
pueblo querido;
al reencuentro con los tuyos..... Siempre serás para mí; la más
ferviente y entusiasta pelonina, sufridora de tan triste
destierro; pero siempre, al lado de los tuyos………
Te querré, por toda la eternidad……