Queria enviar un saludo al
pueblo, especialmente al
bar (justo al lado del
albergue) y a uno de sus vecinos, el señor J.
Calle. Hoy justo hace un año pasamos por allí, nosotros haciamos un
camino algo particular porque lo haciamos hacia
Sevilla. Tuvimos una bonita y curiosa conversación con uno de sus vecinos que cuando averiguo que eramos catalanes, nos confesó su anticatalanismo, que no pisaria nuestra tierra en su vida. Poquito a poco intenté hacerle cambiar de opinión, a mi el me pareció un buen
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