Señales caídas, secaderos de tabaco hechos añicos,
árboles partidos, tejas rotas en el centro de las
calles y barandillas de hierro arrancadas de los
jardines son algunos de los desperfectos que ayer aún podían verse en
Aldehuela del Jerte y
Holguera, dos de los
pueblos más afectados por el tornado que el viernes por la
noche pasó por la comarca del
Valle del Alagón. "Se fue la luz, miramos al
cielo y vimos una especie de
niebla tremenda, pasamos un miedo impresionante". Así relataba Isabel Marcos,
... (ver texto completo)