Las cifras del Instituto Español de Emigración ofrecen una distribución por edades que recoge de manera parcial la realidad de la emigración, porque reflejan los emigrantes que salieron del país con contrato, pero no a los que emigraron por la vía de la reagrupación familiar, que añadiría un numero importante de menores de 13 años.
Pese a esa importante limitación, parece indiscutible que emigraron preferentemente los que tenían entre 20 y 40 años.
No faltaban sin embargo los emigrantes muy jóvenes. La edad laboral empezaba a los 14 años y de ahí hasta los 20 representaban el 10% de los contratados. El 1% de los menores de 13 años es una irregularidad, ya que no deberían haber conseguido un contrato de trabajo.
Desde los 40 a los 65 se reducía paulatinamente el volumen de emigración.
Pese a esa importante limitación, parece indiscutible que emigraron preferentemente los que tenían entre 20 y 40 años.
No faltaban sin embargo los emigrantes muy jóvenes. La edad laboral empezaba a los 14 años y de ahí hasta los 20 representaban el 10% de los contratados. El 1% de los menores de 13 años es una irregularidad, ya que no deberían haber conseguido un contrato de trabajo.
Desde los 40 a los 65 se reducía paulatinamente el volumen de emigración.