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JARAICEJO: Hola, mis estimados paisanos monjinos, como hoy es...

Hola, mis estimados paisanos monjinos, como hoy es el DÍA MUNDIAL DE LA POESÍA, quiero dedicaros a todos una poesía que compuse al LIBRO como regalo en este día en el que defiendo al libro frente a tantos tristes trastos, abortos de la técnica, cuyo mal uso tanto mal están haciendo a muchos seres a los que absorben tiempo, dinero y salud y los alejan de la verdadera cultura. Espero y deseo que os guste. Tomadlo como un regalo poético en este día de la poesía...
No sé qué pasa en este foro, parece que nadie quiere intervenir en él; de seguir así, también TENDRÉ QUE DEJAR DE INTERVENIR YO EN ÉL, porque no quiero tener tanto protagonismo. Nunca me ha gustado el protagonismo. Entré en el foro con la nobleza de regalar poesía a aquellos paisanos que no tienen mis libros, tanto a los que viven en el pueblo como a los que están fuera. Pensaba (¡ingenuo de mí!) que la poesía de un paisano podría interesarles. Algunos me han criticado que yo publicaba mis libros para enriquecerme con ellos... ¡Qué poco conocen el tema poético! Quise desmontarles esa falsa y malintencionada opinión. Por ello, pensé que sería positivo ofrecerles gratuitamente mi trabajo poético en este foro. La poesía es un trabajo intelectual, ¿quién hace un trabajo sin exigir que le paguen un salario o sueldo a cambio? "Por sus obras los conoceréis", se dice en La Biblia. Un foro es un sitio donde intervienen muchas personas, no una sola persona...
Saludos cordiales y amistosos de vuestro paisano

Wenceslao MOHEDAS Ramos
Jaraicejo (Cáceres) / Barcelona

AUTODEFENSA DEL LIBRO (1)
(El libro se defiende por sí mismo de tantos tristes trastos)

Yo soy tu mejor amigo
y tu amistoso maestro;
mi saber yo te demuestro
si hablo en silencio contigo.

El padre soy del progreso
de toda la especie humana,
mi epidermis blanquillana
lo lleva con sangre impreso.

Soy la fuente del saber
y el alimento del alma
que la sed y el hambre calma
y doy, de postre, placer.

Soy complejo vitamínico
- ¡desde la "A" hasta la "Z"!-;
mi lectura es mejor dieta
que cualquier producto químico.

Curo anemia, raquitismo,
tisis, miopía... mentales
y toda gama de males
del turbio analfabetismo.

Manojo de hojas sin rama
que ocupa poco lugar
en ese propicio altar
de tu mesa o de tu cama.

A hablar y a escribir te enseño
y ejercito tu memoria;
yo te aparto de la escoria
del vicio sucio y cenceño.

Yo te lleno ese vacío
de ideas de tu cabeza
y marchito la tristeza
que florece de tu hastío.

Y, si te encuentras a cero
en cuestiones de cultura,
poco a poco, mi lectura
te hará rico... ¡sin dinero!

Porque cultura es cultivo
que enriquece a largo plazo;
por eso, existe un rechazo
del ejercicio lectivo.

Por ser libro te hago libre
y te alimento la mente
y siembro en ti la simiente
para que el alma te vibre.

Si tú pones más empeño
en seguirme en mis consejos,
verás los bellos reflejos
de un horizonte de ensueño.

Yo te daré la estatura
mental de humana persona;
te cubriré con corona
de luz refulgnente y pura.

Por mí subirás escalas
sociales si estas abajo:
el estudio es un trabajo
que nos da vuelos... sin alas.

Si buscas mi compañía
y tu corazón me ama,
quizá el clarín de la fama
sonará por ti algún dia...

No divinizo el dinero
ni tanta falaz fortuna;
sirvo siempre de vacuna
al ser sensato y sincero.

Tengo legión de adversarios
con los que combato a solas:
vídeos, cadenas, consolas...
del consumo mercenarios.

Tropel de inerte materia
que impone de forma impúdica
su visión festiva y lúdica
de mercadillo de feria.

Soy más noble que la tele;
no te programo cadenas...,
sólo anestesio tus penas
sin convertirte en pelele.

Ni te altero tus neuronas
con violencias, erotismos
y procaces prosaísmos
de realidades ramplonas.

Yo no formo visionarios,
informo a seres reales,
los transformo en personales
y no en borregos gregarios.

Caja loca... de Pandora
que enseña... - ¡mala maestra!-
tanta morralla siniestra
que la mente deteriora.

Es una droga nefanda
que, en dosis de gran consumo,
tu tiempo convierte en humo
y tu voluntad te ablanda.

Con tanta imagen quimérica,
tu imaginación te roba,
te robotiza, te emboba
y te hace persona histérica.

Te emite un mundo hedonista
donde imperan los placeres,
te barre nobles deberes
y te torna un conformista.

Contra el triste escaparate
de este tropel de artefactos
sin tratos, treguas ni pactos,
yo estaré siempre en combate.

Porque quiero verte libre,
no esclavo de tecnocracias
que condenen a desgracias
de incalculable calibre...

Wenceslao Mohedas Ramos
Jaraicejo (Cáceres) / Barcelona

(1) Poema premiado en un certamen poético de la ciudad de Mérida (Badajoz)