Cantar y “patear” los abundantes charcos que había cualquier calle y la falta de gorrones lo formaban. ADP.
Esa manía que tenían los quintos de pisar los charcos de las calles venia de cuando éramos pequeños que gustaba con los zancos meterse en ellos y cruzar los regatos. Todas las cosas tienen sus explicaciones y orígenes.
Esa manía que tenían los quintos de pisar los charcos de las calles venia de cuando éramos pequeños que gustaba con los zancos meterse en ellos y cruzar los regatos. Todas las cosas tienen sus explicaciones y orígenes.
Primo de todas formas que le gusta a los niños el pisar los charcos, en cuanto ven uno a por el van.
Un abrazo
Un abrazo