(2)... Modesto Guillén con su acordeón, repitiendo una y otra "Los pajaritos"; mientras dos mozas o pareja bailaban con el permiso del respetable que echaban dinero en la bandeja diciendo: "para que baile" o "para que pare". Y cuando no era posible, siempre había gente, se acercaba al tío Modesto con los ojos cerrados y medio dormido.... CONTINUARÁ. Saludos.